Escándalo en Tailandia: mujer chantajeó a monjes con videos sexuales y obtuvo millones
La “Señora Golf” habría obtenido cerca de 12 millones de dólares al grabar encuentros íntimos con monjes y exigir dinero a cambio de silencio.
Monjes meditando en la ceremonia de celebración del Día de la Madre Tierra en Tailandia, 22 de abril del 2022.
Una mujer identificada por la policía tailandesa como “Señora Golf” fue arrestada tras ser acusada de mantener relaciones sexuales con varios monjes budistas y luego chantajearlos con fotos y videos explícitos. Según las autoridades, la mujer obtuvo cerca de 385 millones de bats —alrededor de 11,9 millones de dólares— en los últimos tres años mediante extorsiones sistemáticas.
Durante el allanamiento de su domicilio, la policía encontró más de 80.000 imágenes y grabaciones utilizadas para presionar a los religiosos, muchos de los cuales transfirieron grandes sumas de dinero a la sospechosa. En al menos un caso, “Señora Golf” exigió más de siete millones de bats a un abad de Bangkok tras afirmar que había tenido un hijo suyo y pedir manutención.
La investigación comenzó en junio, cuando un monje abandonó inesperadamente su templo. La policía descubrió luego que otros religiosos habían sido víctimas del mismo esquema. Parte del dinero habría sido destinado a apuestas en línea, según indicaron las autoridades. La mujer enfrenta cargos por extorsión, blanqueo de capitales y receptación de bienes robados.
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El escándalo ha provocado un fuerte impacto en Tailandia, país en el que más del 90% de la población se identifica como budista. En respuesta, el Consejo Supremo de la Sangha —la máxima autoridad del budismo tailandés— anunció la creación de un comité para revisar las normas monásticas. El gobierno, por su parte, evalúa aplicar sanciones más severas a los monjes que incumplan el código de conducta, incluyendo penas de prisión.
El propio rey Vajiralongkorn revocó esta semana una orden que concedía títulos honoríficos a 81 monjes, citando “el sufrimiento mental causado entre los fieles” por los recientes casos de mala conducta.
Este no es el primer escándalo que sacude al budismo en Tailandia. En 2017, el monje Wirapol Sukphol fue arrestado por delitos sexuales y fraude, y en 2022, un templo quedó sin monjes tras una redada antidrogas. Pese a las denuncias, expertos advierten que la rígida jerarquía del sistema religioso dificulta el control interno y desalienta las denuncias por parte de monjes jóvenes.
“Lo importante ahora es revelar la verdad para disipar las dudas del público”, señaló Prakirati Satasut, socióloga de la Universidad Thammasat. A juicio de varios académicos, la actual ola de investigaciones podría ser clave para una reforma profunda de la centenaria institución.
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