Ministro Cordero afirma que personas privadas de libertad actualmente son “la tasa más alta que hemos tenido en la historia”
El titular de Justicia apuntó a que “la idea de que metiendo a mucha gente a la cárcel estamos solucionando el problema tiende a ser engañosa”.
El sistema penitenciario de Chile ha sido objeto de preocupación y críticas debido al alto número de personas privadas de libertad y las implicaciones que esto tiene para el crimen organizado. El ministro de Justicia, Luis Cordero, en una reciente entrevista con radio Pauta, abordó esta problemática, destacando el crecimiento histórico de la población carcelaria y los desafíos que esto conlleva.
Cordero señaló que, desde hace más de un año, se ha observado un aumento significativo en la tasa de personas privadas de libertad. “Esta es la tasa más alta que hemos tenido en la historia, en ritmos de crecimiento que no habíamos experimentado antes”, afirmó. Este incremento plantea serios problemas a largo plazo, especialmente en un sistema penitenciario que ya enfrenta problemas de sobrepoblación.
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La sobrepoblación carcelaria no solo afecta las condiciones de vida dentro de las prisiones, sino que también tiene repercusiones en la seguridad pública. Cordero explicó que, en un sistema penitenciario sobrepoblado, es difícil manejar eficazmente a los miembros de organizaciones criminales. “Cuando tienes organizaciones criminales, es crucial segregar eficazmente a sus miembros y distribuirlos no solo dentro del penal, sino en distintos penales”, comentó. Esto es fundamental para inhabilitar el funcionamiento de estas organizaciones desde el interior de las cárceles.
Plan de Infraestructura Penitenciaria
En respuesta a estos desafíos, el titular de Justicia destacó los esfuerzos para mejorar la infraestructura carcelaria del país. “Hemos intentado construir un plan de infraestructura penitenciario de modo permanente”, dijo Cordero, reconociendo que la construcción de una nueva cárcel puede demorar entre 12 y 14 años. A pesar de estos desafíos, Chile ha realizado avances significativos. “El país tiene un poco más de 600 módulos de alta seguridad, y los va a duplicar en un tiempo más”, añadió.
Cordero también subrayó que la sobrepoblación carcelaria puede generar una falsa sensación de seguridad. “La idea de que metiendo a mucha gente a la cárcel estamos solucionando el problema tiende a ser engañosa”, explicó. Es esencial que la política penitenciaria no solo se enfoque en el encarcelamiento masivo, sino en la gestión eficaz y la segregación de los internos, especialmente aquellos vinculados a organizaciones criminales.
Investigación Criminal dentro de las Cárceles
Finalmente, el ministro destacó la importancia de utilizar las cárceles como espacios de investigación criminal. “El Ministerio Público ahora realiza investigaciones dentro de las cárceles, y gendarmería ha sido facultada como auxiliar de estas investigaciones”, explicó Cordero. Este enfoque ha permitido desbaratar crímenes que se planifican desde dentro de las prisiones. “Las investigaciones dentro de la cárcel son cruciales para desmantelar organizaciones criminales fuera de ellas”, concluyó.
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