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Cristián Campos enfrenta su alejamiento de Canal 13 con proyectos en teatro: «Es renovarse o morir»

El afamado actor, desligado de las filas de la señal tras 38 años, conversó con Ciudadano ADN de sus proyectos, que incluyen el exitoso montaje teatral "La última sesión de Freud".

Cristián Campos enfrenta su alejamiento de Canal 13 con proyectos en teatro: «Es renovarse o morir»
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Alcanzó a estar un capítulo en pantalla con "Amor a la Catalán", la nueva teleserie de Canal 13, en la que su personaje muere detonando el principal conflicto entre sus dos ex mujeres (Tamara Acosta y Catalina Guerra). "Llevo como tres muertes al hilo", comentó Cristián Campos en entrevista con Ciudadano ADN.

Porque, además de en "Amor a la Catalán" ("es una comedia desopilante, cambiamos el paso en el prime y funcionó"), también resultó muerto en su anterior producción ("Pacto de sangre") y en la obra teatral "Todos eran mis hijos". "Me gusta morirme, pero es quedarme sin trabajo", comentó entre risas. "Pienso en la muerte en el sentido de carpe diem. Tengo conciencia de que estoy vivo y no sé por cuánto tiempo más".

Campos debió enfrentar la grabación de la escena de su funeral dentro del ataúd. Algo difícil para él, quien se reconoce claustrofóbico. "Fue duro, pero (Vicente) Sabatini, un director muy talentoso, muy considerado, me preguntó 'cuánto aguantas'. Quince segundos, dije, lo cronometraban, hacían la toma y me lo levantaban, pero la pasé mal, transpiré helado", recordó.

Ahora está en cartelera en el teatro de la Universidad Católica junto a Héctor Noguera, protagonizando uno de los éxitos de la temporada, "La última sesión de Freud", que tiene sus entradas agotadas. Ante este escenario, se declara "sorprendido. No es una comedia romántica sexual con disfunción eréctil", dice, "sino Freud hablando de Dios y de la fe. No era un tema para un éxito avasallador". Para él, existe "una sed de contenido. La gente necesita antídotos a la realidad, una especie de consuelo".

En las últimas semanas, Campos hizo noticia por su desvinculación de Canal 13, casa televisiva donde hizo toda su carrera por 38 años. "Es raro porque uno se va institucionalizando. Probablemente soy uno de los funcionarios más antiguos, conozco a todo el mundo, afectivamente es complicado y financieramente también". Sin embargo, dice, y frente al nuevo modelo que privilegia productoras externas a cargo de los productos de ficción, esto se trata de "adaptarse o morir", y se va agradecido de un canal donde "hice prácticamente de todo: programas estelares, escribí libretos, dirigí actores. Pero es duro ver a un canal con tanto estudio, prácticamente vacío porque las producciones se hacen afuera".

Pero su momento actual tiene otras gratificaciones, y una de ellas es la "chochera" de actuar junto a su hijo Antonio en "Amor a la Catalán". "La evolución funciona, a mis dos hijos (Pedro es parte del elenco de "Juegos de poder" de Mega) los encuentro muy buenos, tienen una cosa muy audiovisual". Sin embargo, le preocupa la inestabilidad del trabajo de los actores, y por eso prefiere distraer a su hija menor, Julieta. "La llevo mucho al veterinario", confiesa con humor, pero es su madre, la actriz María José Prieto, quien le está mostrando el mundo de la televisión. Pese a esa resistencia, dice, "no podría negarle la posibilidad de ser actriz si quiere".

Y entre los nuevos planes profesionales de Campos, está su último compromiso con Canal 13: una serie de comedia sobre la tercera edad, más nuevos proyectos teatrales (entre ellos, junto a María José Prieto, la obra "Lección de baile" del mismo autor de “La última sesión de Freud”, Mark St. Germain) y "me encantaría hacer radio, lo encuentro maravilloso, me encanta conversar, incluso uno no se tiene que afeitar".

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