¿Qué es el 5G? Experto explica la llegada a Chile de esta red: «No te gastes el 10% en un teléfono nuevo, porque viene un cambio»

Luego del anuncio de la licitación de las redes 5G en Chile, hecho esta semana por el Presidente Sebastián Piñera, Ciudadano ADN conversó con un experto en la materia, el ingeniero de la UTEM y experto en telecomunicaciones, Miguel Sanhueza, para aclarar qué significará en nuestras vidas cotidianas este nuevo sistema de comunicación.

Para Sanhueza, estamos ante «un punto de inflexión, que va a significar un cambio en las telecomunicaciones que todavía no vislumbramos totalmente». Las redes 5G, explicó, significan 100 veces mayor velocidad, lo que derivará en «mayor potencia y mayor producción». El experto recordó también que el 5G «tendría que haber estado operando en marzo de este año, pero por distintos motivos se ha ido atrasando». 

«Las dimensiones son inmensas», comentó, pensando en utilidades desde seguridad en los barrios, hasta la telemedicina, la educación online e industrias como la minería, que por ahora son ejemplos que alcanzan un porcentaje acotado del país. «La gracia del 5G es que esto va a poder ser masificarse». Del mismo modo, este sistema permitirá trabajar con realidad virtual pero a distancia, con personas de los cinco continentes conectadas al mismo tiempo.

La cantidad de información que se va a poder trasladar, adelantó, es «inmensa. ¿Cuántos  hemos sufrido cuando cargamos una película en streaming y se corta, aunque la compañía nos ofrece 600 o 800 megas? Eso ya no va a pasar». Sin embargo, este adelanto también vislumbra un riesgo: «a mayor cantidad de canales transmitiendo información, más posibilidad de que esa información se pueda filtrar».

Sanhueza también disipó dudas relativas a la infraestructura que las nuevas redes requerirán. «No es que vamos a ver tremendas antenas a metros de nuestra casa». Al tratarse de una tecnología más moderna, las antenas son más pequeñas, aunque deberán estar instaladas en distintos puntos de la ciudad, por lo que la inversión es gigantesca, y requiere la participación de empresas transnacionales, «porque el Estado solo no puede hacerse cargo».

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Del mismo modo, el experto recalcó la importancia de que las compañías telefónicas nacionales estén a la altura del desafío. En el marco de la pandemia, Sanhueza, también profesor universitario, cuenta que «me ha tocado ver cómo muchos de mis estudiantes han tenido un tremendo calvario para poder conectarse a las clases. Muchas compañías se exceden en publicidad diciendo que tienen gran cobertura, pero quedó demostrado que no es así», y menos aún en zonas suburbanas o rurales. Por eso, a la hora de licitar redes 5G, el Estado tiene que salvaguardar «todas las zonas donde las empresas no van a tener ganancias. Porque se van a pelear por el Gran Santiago, pero las zonas alejadas, o la precordillera, no».

Al respecto, y a la hora de implementar estas redes, «tenemos que evitar casarnos con una sola empresa», piensa el experto. Hoy, están en el ruedo grandes multinacionales como la estadounidense Google o la china Huawei. «Tenemos que ser transparentes y claros en que, sin importar la empresa, la cobertura tiene que ser lo suficientemente fuerte para llegar a cualquier lugar».

Sin embargo, y como ha quedado de manifiesto, muchos sectores se oponen al 5G, por razones que van desde presuntos aumentos en la radiación electromagnética, pasando por mecanismos de filtración de información, hasta razones de seguridad nacional. Al respecto, Sanhueza piensa que «en realidad nuestra identidad fue usurpada hace muchos años atrás, porque estamos inmersos en la red, y eso es porque nosotros mismos hemos entregado nuestros datos. Nada en esta vida puede dar 100% de seguridad de que nadie pueda acceder a los datos». Algo que vimos hace un par de semanas en Alemania, con la filtración de datos de autoridades. Eso sí, el experto enfatizó que «las redes 5G obligan a actualizar las leyes y normativas sobre cómo se resguardan los datos», una materia donde en Chile estamos al debe. «Tenemos la misma ley hace 20 años, cuando no había ni WhatsApp».

El ingeniero también mencionó que la nueva tecnología implicará un cambio en nuestros aparatos de uso cotidiano, como computadores y teléfonos. «No te gastes el 10% todavía en un celular nuevo»,recomendó. Los nuevos teléfonos preparados para el 5G deberán venir con SIM integrado, dejando atrás el viejo microchip, y permitiendo «ir por distintos países del mundo y te olvidas del roaming». Además, enfatizó, «los celulares son desechables, cambian cada dos años», y eso va a ser incluso en menor cantidad de tiempo. Lo mismo se espera para artículos como relojes, tabletas e incluso para la televisión.

Seguridad, precios y próximos dispositivos

Otra preocupación, sin duda, tiene que ver con la seguridad. Sanhueza manifestó que la fibra óptica «sigue siendo un canal rápido y seguro», y que los satélites retransmitirán la información, pero los troncales son los cables. El problema, explicó, es que en Chile «estamos en un rincón del mundo, y para poder llegar necesitamos grandes troncales, y eso lo van a tener que hacer empresas multinacionales».

En cuanto a los precios, Sanhueza espera que el costo de los planes se estabilice, producto de una mayor demanda y «si es que hay competencia». Eso sí, «al principio se van a disparar en precio, pero con el tiempo van a ir estabilizándose, lo mismo que sucedió con los primeros teléfonos 4G». 

Y mientras hoy las redes Wi-Fi y 4G pueden funcionar perfectamente en una casa, Sanhueza advierte que el 5G podría hacer necesaria una antena en cada piso, cuando se trate de espacios muy separados. «Por muy fuerte que sea la antena, no va a permitir que la señal pase al 100%. Es como cuando ampliamos nuestra casa, nos obliga a tener más enchufes y lámparas».

Por último, el experto evitó «casarse» con una compañía, marca de tecnología o país a la hora de elegir la mejor tecnología para nuestro país, aunque «siempre el mundo asiático ha llevado la delantera». «Nosotros que somos de la Generación X, nuestros padres siempre nos dijeron que todo lo chino era desechable y malo, pero hoy tenemos a Huawei como potencia tecnología. Y en Europa hay marcas que son primera línea, entre los 10 mejores celulares del mundo. Pero hay que cambiar el concepto. Nuestros papás compraban la lavadora o el microondas para toda la vida, pero hoy todo lo tecnológico es desechable y tiene una vida útil. El mundo cambió», enfatizó.

Mientras tanto, en Chile seguimos mayoritariamente eligiendo entre iPhone y Android a la hora de comprar un teléfono, pero según recordó, «para qué me voy a comprar el último modelo si solo voy a sacar fotos». Su recomendación pasa por definir el uso real del equipo antes de comprar. «Si te gusta tomar fotos, un celular con buena cámara. Si ves harto streaming, un procesador bueno».