Fernando Chomalí y caso Karadima: Juan Carlos Cruz se acercó a mí y yo no estuve a la altura de su dolor

El nuevo arzobispo de Concepción, Fernando Chomalí, reconoció en ADN Radio Chile que Juan Carlos Cruz, una de las victimas del caso Karadima, acudió a él y le contó su caso pero que su reacción fue fría y distante.

"Eso es cierto, yo a Juan Carlos Cruz lo conozco en el seminario. El tuvo una cercanía muy grande con mi familia cuando tuvimos una persona familiar muy enferma. Lo dejé de ver durante mucho tiempo porque él se fue a Estados Unidos. También es cierto que en abril del 2010 me mandó un email, acercándose a mí pidiendo apoyo y yo reconozco humildemente que fui frío, lo reconozco humildemente. Le pedí perdón a él. No estuve a la altura de su dolor, de su angustia, porque no fui capaz de reconocerlo y aprendí mucho de esa experiencia. Le pedí perdón y le pedí expresamente que cuando venga a Chile volvamos a encontrarnos”.

En este sentido, sostuvo que en el "caso Karadima, el Vaticano ha sido muy claro. La conferencia episcopal ha pedido perdón. Hemos tomado el toro por las astas ha través de acciones bien concretas para que esto nunca más vuelva a ocurrir en ninguna parte menos en la iglesia".

"La primera víctima que se me acercó a mí el año 2010, cuando ya estaba el proceso muy avanzado, fue Juan Carlos Cruz y evidentemente que el Cardenal reconoció que se equivocó que cometió errores, poca experiencia y también él pidió perdón este domingo de manera en el fondo muy sentida y creo que lo enaltece mucho a él, y tengo entendido que tiene toda la intensión de juntarse con ellos y yo también estoy dispuesto porque lo que aconteció ahí, el testimonio de ellos realmente estremece y también hay un cierto pudor frente a personas que han sufrido mucho y dios quiera que todo termine bien y haya perdón", agregó Chomalí.

"El famoso dicho que se usaba antes, los trapitos sucios se lavan en casa, eso se acabó. La gente tiene todo el derecho de ir a los tribunales de justicia porque son delitos. Los sacedotes, las religiosas, los obispos somos ciudadanos chilenos y tenemos que responder todos ante la ley. Y evidentemente que esto es la contradicción misma del sacerdocio, aunque haya un solo caso hay que actuar con mucha más diligencia  y estamos en eso. Usted vio la declaración de la conferencia episcopal. Se están tomando medida muy concretas para que esto nunca más vuelva a ocurrir".

"Con esa actitud voy a Concepción. Voy con la actitud del que quiere servir, quiero que mi actitud este al servicio de la gente. No quiero imponer nada sino que sencillamante mostrar lo que yo creo que es verdadero, que es bello y que a mí en la vida me ha hecho muy feliz".