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Gobierno de Donald Trump espió a tres periodistas que informaban sobre la trama rusa

El Departamento de Justicia obtuvo en secreto grabaciones de llamadas telefónicas de profesionales del The Washington Post.

Donald Trump y Mike Pence en la Casa Blanca

Donald Trump y Mike Pence en la Casa Blanca / Mark Wilson

Desde Richard Nixon con el escándalo de Watergate hasta Donald Trump con la trama rusa. El gobierno del multimillonario republicano obtuvo en secreto grabaciones telefónicas de periodistas del diario The Washington Post. Además intentaron acceder a los correos electrónicos de tres profesionales de la prensa.

El hecho se produjo en los primeros meses del mandato de Trump y a través del Departamento de Justicia. En ese período espió a tres profesionales que informaban acerca del rol de Rusia en las elecciones de 2016. La información sobre el tema fue referida a los periodistas por funcionarios del actual gobierno.

El Departamento de Justicia envió cartas el 3 de mayo a los periodistas, dos activos y uno que ya no está en ese periódico. En la misiva les notifica por «procedimiento legal» de la recepción de los registros de comunicaciones. Ahí se detalla que afectó a tres números de teléfonos del 15 de abril al 31 de julio de 2017.

Las cartas precisan los números de teléfono, de la oficina y móvil, de los tres periodistas espiados. El director ejecutivo en funciones del medio, Cameron Barr, expresó su inquietud por la noticia. «Estamos seriamente preocupados por este uso del poder del gobierno», comentó el titular del periódico.

Barr solicita «esclarecer de inmediato las razones para su intromisión en la actividad informativa de periodistas». Además manifiesta al Departamento de Justicia que afecta «una actividad protegida por la Primera Enmienda». La llamada trama rusa fue investigada por el FBI, comités del congreso y un fiscal especial.

En la pesquisa el fiscal Robert Mueller no encontró pruebas de conspiración entre Trump y Moscú. Mueller sí dejó abierta la posibilidad de que el republicano cometiera un delito de obstrucción a la justicia, al tratar de entorpecer las investigaciones. El millonario siempre calificó la indagatoria de una caza de brujas.

The Washington Post informa que el penúltimo episodio de incautación de grabaciones se produjo en 2018. Entonces el Departamento de Justicia accedió a las comunicaciones de una periodista en una investigación sobre sus fuentes. El contenido de las informaciones giraba alrededor de la trama rusa.

ADN

La sede del Departamento de Justicia en Washington / CHANDAN KHANNA

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