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Fiscalía de Bolivia ordenó detención de Jeanine Áñez por «sedición y terrorismo»

La exmandataria interina sigue con paradero desconocido, luego de que la policía no la encontrara en sus domicilio.

Jeanine Añez durante su ciclo como mandataria interina de Bolivia

Jeanine Añez durante su ciclo como mandataria interina de Bolivia / Gaston Brito

La crisis que derivó en un golpe de estado en noviembre de 2019 toma otro rumbo en Bolivia. Un fiscal ordenó el arresto de la exmandataria, Jeanine Áñez, acusada de «sedición y terrorismo». La excongresista asumió el gobierno en una irregular decisión tras la renuncia forzada de Evo Morales.

Las órdenes de captura también incluyen a miembros del exgabinete de ministros y a la excúpula militar. El fiscal busca acusar a todos los jefes del ejército y de la policía que pidieron la renuncia de Morales. Las autoridades sospechan que parte de los buscados se encuentran fuera del país.

Añez utilizó Twitter para asegurar que «la persecución política ha comenzado». La Razón informa que no se conoce el paradero de la acusada, luego de que la policía no la encontrara al allanar su domicilio. Los exministros Álvaro Coimbra y Rodrigo Guzmán fueron aprehendidos en el caso «Golpe de Estado».

La cúpula militar forzó la salida de Morales en una conferencia que quedó registrada. El comandante en jefe de las fuerzas armadas, Williams Kaliman, le «sugirió» que «renuncie a su mandato». El militar justificó la posición debido las protestas por las acusaciones de falso fraude en las elecciones de 2019.

Kaliman es buscado por eventuales actos de «terrorismo, sedición y conspiración». También se busca al general Sergio Orellana, quien ocupó el mando de las FFAA cuando Áñez asumió la presidencia. El militar debe responder por la muerte de 30 personas en unas protestas contra la mandataria interina.

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Pintada en contra de Áñez en la ciudad de El Alto / Gaston Brito

Un comandante militar y uno policial se encuentran con detención domiciliaria por ese caso. Las investigaciones de la policía determinaron que Orellana dejó el país a fines de 2020 y vive en Colombia. El exjefe del estado mayor, Flavio Arce, fue el único que se presentó voluntariamente y fue arrestado.

El excomandante Yuri Calderón es otro de los buscados y en noviembre de 2019 se declaró en rebeldía contra del gobierno. La Policía allanó sin éxito dos domicilios para dar con el militar. La orden de detención incluye a los exministros Arturo Murillo, Yerko Núñez y Fernando López.

El País detalla que los delitos de sedición y terrorismo implican penas de entre 5 y 20 años de prisión. La oposición asegura que los sucesos arrastraron a las instituciones a un «levantamiento popular». El juicio puede incluir al gobernador electo de Santa Cruz, Luis Camacho, y a su padre empresario.

A ambos se les acusa de pagar a la policías para que se sumaran al motín, precipitando la crisis. Deutsche Welle aclara que el titular del senado boliviano, Andrónico Rodríguez, defendió las órdenes de arresto. «No es persecución, es justicia», expresó el congresista a través de sus redes sociales.

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Protesta contra el gobierno interino de Añez en agosto de 2020 / Gaston Brito

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