Arando Esperanza: fundación genera oportunidades de trabajo para personas con discapacidad: Es clave «derribar mitos y barreras»
Desde 2004, esta fundación incorpora a personas vulnerables con discapacidad en distintas empresas, trabajando tanto con las personas como con las organizaciones, y contribuyendo a derribar mitos, barreras y miedos. Su directora ejecutiva, Sandra Olave, conversó con Ciudadano ADN.
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Arando Esperanza es una fundación que, desde 2004, trabaja por la inclusión, buscando generar oportunidades laborales para personas vulnerables con discapacidad. Sandra Olave, su directora ejecutiva, contó en Ciudadano ADN que el modelo nace desde una innovación del modelo ECA, nacido en Estados Unidos. «Lo hicimos a la realidad de Chile, con nuestros recursos, creando un modelo inclusivo tanto para las personas como para las empresas».
La iniciativa partió vinculándose con empresas del sector agroindustrial -de ahí su nombre- pero hoy están trabajando con organizaciones de todo tipo. Muchas de ellas, sin embargo, desconocen cómo integrar correctamente a personas con discapacidad. «Yo no era muy partidaria de la Ley de Inclusión, porque debió hacerse con una política pública. No le dijimos a las empresas cómo lo tenían que hacer, y por eso han tenido dificultades».
Sandra Olave contó que, a través de su proyecto, a la fecha se han incluido 900 personas con discapacidad en distintos sectores productivos, con una tasa de permanencia del 94%.
Las principales dificultades para incluir a personas con discapacidad en las empresas, según Sandra, pasa por «derribar mitos y barreras. Hay un desconocimiento de los diagnósticos, de las barreras y de los ajustes que realizar. Hay que educar y apoyar a las empresas, y también a las personas que van a entrar a trabajar».
Arando Esperanza trabaja tanto con las personas, como con las empresas. A causa de la pandemia muchas de ellas llevaron a sus trabajadores con discapacidad a suspensión de contrato, pero de a poco han ido regresando a sus puestos de trabajo. La dificultad más grande, explicó Sandra, está en diagnósticos como discapacidad cognitiva. «Hay que hacer todo un trabajo para incorporar a personas en puestos presenciales, que se están perdiendo».
Petrobras, Liberty, Tucapel y Electrolux son algunas de las empresas que trabajan en conjunto con Aranda Esperanza. «Esto funciona mucho con el boca a boca. Pero nuestro modelo le da mucha seguridad a las empresas, porque hacemos seguimiento permanente», aseguró.