Un desaire de Griezmann desató una escena de drama e indignación
Una fanática quería un autógrafo del francés, pero su ídolo la vio y pasó de largo.
El francés Antoine Griezmann ignoró a una fanática que quería un autógrafo y desató una escena llena de dramatismo e indignación.
El hecho ocurrió en la previa del partido del Bayer Leverkusen y el Atlético de Madrid, cuando los jugadores colchoneros dejaban el bus y entraban al hotel de concentración.
Aprovechando la visita del equipo español gracias a la Champiosn League, una joven identificada como Emily acudió al lugar, con la camiseta de la selección francesa y un plumón, con el deseo de obtener una firma de su jugador favorito.
Pero el seleccionado galo la miró y pasó de largo. La joven comenzó a llorar, su padre la abrazó y trató de consolarla. El hombre, indignado y furioso por la actitud del futbolista, alegó que habían conducido 200 kilómetros solo para ver a la estrella colchonera y ahora se debían marchar con las manos vacías.