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VIDEO. El mordisco más famoso del heavy metal: la noche en que Ozzy Osbourne le arrancó la cabeza a un murciélago

El excéntrico líder de Black Sabbath, que falleció este martes a los 76 años, protagonizó uno de los momentos más icónicos y polémicos del rock en 1982.

(Photo by Paul Natkin/Getty Images)

(Photo by Paul Natkin/Getty Images) / Paul Natkin

Este martes 22 de junio falleció Ozzy Osbourne, leyenda del heavy metal y exvocalista de Black Sabbath, a los 76 años. El mundo de la música despide a uno de los artistas más influyentes del rock, cuya carrera estuvo marcada tanto por su talento como por sus excéntricas conductas. Uno de los episodios que más contribuyó a forjar su leyenda ocurrió el 20 de enero de 1982, en el Veterans Memorial Auditorium de Des Moines, Iowa, Estados Unidos: la noche en que mordió la cabeza de un murciélago vivo en el escenario.

El episodio se convirtió rápidamente en parte del folklore del rock. Durante un concierto de su gira Diary of a Madman, un fan lanzó lo que creía que era un murciélago de goma al escenario. Osbourne, conocido por sus gestos provocadores, lo tomó y, sin dudarlo, le arrancó la cabeza con los dientes frente a miles de asistentes. Inmediatamente se dio cuenta de que el animal estaba vivo.

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Según relató el propio Osbourne en su autobiografía, el murciélago no solo estaba vivo, sino que comenzó a agitar sus alas mientras estaba en su boca. “Fue uno de los momentos más aterradores de mi vida”, confesó. Tras el acto, fue trasladado de urgencia a un hospital para recibir una serie de inyecciones contra la rabia, procedimiento que debió repetirse durante varias semanas.

El insólito hecho generó titulares en todo el mundo y alimentó la imagen oscura y temeraria del artista. Para muchos, fue una expresión de su desenfreno. Para otros, una muestra del extremo al que podía llegar el espectáculo del rock. En cualquier caso, el “episodio del murciélago” se transformó en un símbolo de su irreverencia y contribuyó a consolidar su apodo como el “Príncipe de las Tinieblas”.

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(Photo by Joey Foley/Getty Images) / Joey Foley

A más de cuatro décadas de ese suceso, Ozzy Osbourne partió dejando tras de sí una vida marcada por excesos, escándalos y logros musicales. Pero entre todos los hitos de su carrera, aquel bocado que dio en 1982 sigue siendo una de las imágenes más recordadas del rock and roll.

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