FIFPRO arremete contra el Mundial de Clubes y la FIFA: “No se puede jugar con la salud de los futbolistas para alimentar una máquina de marketing”

El pasado domingo 13 de julio se dio por concluido el nuevo Mundial de Clubes, tras la victoria 3-0 del Chelsea sobre el Paris Saint-Germain en la final.

El campeonato, que en esta reformada edición contó con 32 equipos, fue del agrado de los hinchas, pero no así para algunos jugadores o miembros del mundo del deporte, quienes acusaron que esta nueva competencia comprimía, aún más, el ya saturado calendario del fútbol.

Los últimos en salir a criticar a la FIFA por la organización de esta cita planetaria fueron los encargados del FIFPRO (Federación Internacional de Asociaciones de Futbolistas Profesionales), quienes se mostraron claramente en contra del ente rector y su presidente, Gianni Infantino.

Revisa también:

• La preparación de Palestino para visitar a Bolívar por Copa Sudamericana: “Estar 72 horas antes en La Paz nos va a ayudar”
• Sin citados de los finalistas de la Copa Futuro y una baja por indisciplina: la polémica nómina de La Roja Sub 18 para jugar en L’Alcúdia

“Sin perjuicio de que el reciente Mundial de Clubes generó entusiasmo en numerosos simpatizantes y permitió ver en un mismo torneo a algunas de las principales figuras del fútbol mundial, FIFPRO no puede dejar de señalar, con absoluta claridad, que esta competición oculta una peligrosa desconexión con la verdadera realidad que atraviesan la mayoría de los futbolistas en el mundo”, comenzó diciendo Sergio Marchi, presidente del sindicato, a través de un comunicado.

“Lo que se presentó como una fiesta global del fútbol no fue más que una ficción montada por FIFA, impulsada por su presidente, sin diálogo, sin sensibilidad y sin respeto por quienes sostienen el juego con su esfuerzo cotidiano”, continuaron.

Además, también se criticó uno de los problemas más evidentes de realizar el torneo en Estados Unidos: el clima. “El torneo, además, se desarrolló bajo condiciones inaceptables, se disputaron partidos en horarios de extremo calor y con temperaturas que ponían en riesgo la integridad física de los futbolistas”, señalaron.

“No se puede seguir jugando con la salud de los futbolistas para alimentar una maquinaria de marketing. No hay espectáculo posible si se apaga la voz de los protagonistas”, sentenció FIFPRO.