“Si consume servicios sexuales de niñas explotadas, drogas o compra un celular robado, usted tiene las manos con sangre igual que el Tren de Aragua”

El fiscal regional de la zona sur y jefe del Equipo contra el Crimen Organizado y Homicidios (ECOH), Héctor Barros, lanzó una dura advertencia a la ciudadanía respecto del impacto de consumir productos y servicios vinculados a organizaciones criminales.

En conversación con La Tercera, el persecutor enfatizó que “si usted consume servicios de niños, niñas y adolescentes que son víctimas de trata de personas, o si compra un celular robado, usted también tiene las manos manchadas con sangre igual que el Tren de Aragua”.

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Barros explicó que la criminalidad en Chile cambió radicalmente en los últimos años, sobre todo tras la pandemia, con la llegada de bandas extranjeras que operan con una violencia inédita en el país. “Pasamos de enfrentar bandas territoriales y clanes familiares que traficaban droga en poblaciones, a organizaciones transnacionales que utilizan secuestros, homicidios y extorsiones como mecanismos habituales de control”, señaló.

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Según el fiscal, estos grupos criminales no solo se financian con el tráfico de drogas, sino también con otros mercados ilícitos donde muchos chilenos son consumidores activos. “Hay un tema de oferta y demanda que debemos abordar con una mirada estatal. La explotación sexual y el mercado de la prostitución en Chile está a cargo de una facción del Tren de Aragua, y el consumidor parece no darse cuenta de que puede terminar siendo extorsionado o incluso víctima de secuestro”, advirtió.

El fenómeno ha tenido un crecimiento alarmante. De acuerdo con cifras entregadas por el Ministerio Público, en el primer semestre de este año los secuestros asociados al crimen organizado en la región Metropolitana aumentaron un 28% respecto del mismo periodo de 2024. “Lo que más nos preocupa es que en junio el porcentaje de secuestros se elevó al 40% del total de estos delitos, algo que nunca habíamos visto”, agregó.

El fiscal llamó a reforzar el combate al lavado de activos y a la persecución de estos mercados ilegales: “Es un problema que debe mirarse en su dimensión completa. Si se alimentan estos negocios, se financia el crimen organizado y se perpetúa la violencia”.