Se crea en Chile la primera máquina de hemodiálisis para recién nacidos
Anteriormente, los bebés debían ocupar el dispositivo para adultos en modo "off label". Ahora, gracias a Carpediem tienen una máquina que se ajusta a sus necesidades.
Actualmente, cuando un recién nacido necesita una diálisis para tratar una lesión renal aguda se usan dispositivos creados para adultos en modo "off label", es decir, con adaptaciones fuera de protocolo.
Sin embargo, este escenario cambió favorablemente para los pacientes más pequeños con la invención de Carpediem (Cardio-Renak Pediatric Dialysis Emergency Machine) de Medtronic.
Este dispositivo es una máquina de hemodiálisis especialmente diseñada para recién nacidos y niños/as hasta 15 kg, la cual fue utilizada por primera vez en Chile, y en Latinoamérica, en un procedimiento realizado en el Hospital de Niños Roberto del Río el pasado martes 10 de septiembre.
Carpediem abre un enorme potencial para dializar a recién nacidos, los que hasta ahora no tenían opciones de tratamiento acordes a su tamaño y condiciones médicas.
La primera beneficiaria de este procedimiento fue Lía Mendoza, de dos meses de vida, quien ingresó al hospital con tres días de vida y una patología cardíaca grave. Debido a su complejo estado de salud, accedió primero al soporte ECMO (Extra Corporeal Membrane Oxygenation, asistencia mecánica cardiovascular y respiratoria) y luego a terapia de soporte renal (hemodiálisis).
Este dispositivo es similar a la máquina clásica de hemodiálisis, pero con ciertos componentes en miniatura. Su diseño es verdaderamente "neonatal": es de tamaño pequeño, fácil de manejar y transportar, cuenta con sensores de detección de aire y fugas de sangre altamente sensibles, además de una bomba de heparina. Es la única máquina capaz de realizar ultrafiltración y hemofiltración en bebés recién nacidos con un peso corporal superior a 2,5 kg.
La insuficiencia renal aguda en las Unidades de Cuidados Intensivos Pediátricas (UCIP) oscilan entre 5% y 20% de los pacientes neonatales, dado que sus riñones -especialmente en el caso de los prematuros- no están preparados para cumplir sus funciones adecuadamente.