Día Internacional del Hombre: ¿por qué estos viven menos que las mujeres en Chile?
Este 19 de noviembre se conmemora nuevamente la jornada que arrancó en 1992. La fecha también sirve para reflexionar en torno a la salud del género.
Podría parecer una frase aleatoria, pero no es así. En Chile los hombres viven menos que las mujeres y en concreto son cinco los años de diferencia.
Las cifras vuelven a tomar relevancia jornada antes del Día Internacional del Hombre, una conmemoración planteada en 1992, que se celebra anualmente cada 19 de noviembre y que se sumó para visibilizar la salud masculina a partir de esa década.
Pese a todo, la situación no tendría vínculo con características genéticas propias del género, sino que con sus propias conductas, según las voces entendidas.
“Si de hábitos de salud hablamos, los hombres chilenos tienen rutinas menos saludables que las mujeres”, plantea Waldo Ortega, Médico Familiar de Clínica Alemana, al englobar el fenómeno en la previa al Día Internacional del Hombre.
Acorde al Instituto Nacional de Estadísticas (INE) en 2021 la esperanza de vida era de 76.5 años para hombres y 81.4 para mujeres.
En cifras de la Encuesta Nacional de Salud 2016-2017, los hombres fuman más (con un 36%, frente al 32,% de las mujeres), poseen un mayor consumo riesgoso de alcohol (20,5% vs 3,3%) e incluso comen menos frutas y verduras (13,6% vs 15%).
Según los expertos, post 40 años los hombres debería anotar en su itinerario una serie de exámenes útiles. La idea, según Ortega, es ser consientes de factores de riegos como el tipo de alimentación, el sedentarismo o el abuso de sustancias.
Las causas de muerte comunes en hombres
Malos hábitos en esa línea pueden acarrear las causas de muertes más comunes. Ahí aparecen desde situaciones como infartos al corazón y accidentes cerebrovasculares, hasta cáncer de próstata y pulmón o enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).
Las pruebas que se pueden considerar incluyen exámenes físicos. Una serie de ideas para medir la presión arterial, el sobrepeso o algún signo de resistencia a la insulina.
En cuanto a los exámenes de laboratorio, también es bueno tantear la glicemia en sangre, el perfil lipídico o los propios exámenes alusivos a enfermedades de transmisión sexual.