Tráfico de drogas, balazos, extorsiones y una fiscalización fallida: la trastienda de la detención de involucrado en crimen de Daniel Palma en Quinta Normal
Ovimarlixion Josué Garcés Briceño, cuyas huellas dactilares se encontraban en el vehículo desde donde se le disparó al suboficial mayor asesinado, fue aprehendido en calle Nueva Imperial.

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Detención de un involucrado en el crimen del carabinero Daniel Palma - Juan Espinoza - Ciudadano ADN - 10 de abril de 2023
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Los vecinos de calle Nueva Imperial, en Quinta Normal, llegaron el jueves 6 de abril hasta la oficina de partes de la municipalidad a presentar la denuncia. Había pasado menos de un día desde el crimen del suboficial mayor Daniel Palma, baleado tras una fiscalización en Santiago Centro, en los alrededores del Teatro Caupolicán. Karina Delfino, la alcaldesa, lo recordó este lunes:
«Los vecinos no nos habían denunciado que los asesinos estaban en esta propiedad, sino por tráfico de drogas y balazos».
Cuando llegó personal policial con los funcionarios municipales, «las personas no dejaron ingresar al personal municipal». No obstante ello, se lograron tomar fotografías del lugar. Pero el foco, además del tráfico de drogas, los balazos, los «ruidos molestos» y las incivilidades, el motivo de la fiscalización apuntaba a la construcción irregular y arriendos ilícitos.
Para los 150 mil habitantes de la comuna, los 16 funcionarios de la Policía de Investigaciones (PDI) dispuestos no son suficientes. Menos todavía si se considera que deben también cubrir a Cerro Navia.
Un vecino del galpón donde se encontró a Ovimarlixion Josué Garcés Briceño, uno de los detenidos, habló con ADN: «Sabíamos que habían llegado acá. El barrio es de muchos años. Nosotros tenemos esta fábrica, herencia de mi abuelo, y nos conocemos todos, hasta que llegó esta gente: autos sin patentes y movidas ilegales, incluso en Recoleta».
«El cuidador que tengo me dijo que anoche (domingo) hubo ruidos, movimientos, (él estaba) escondido porque hemos tenido llamados por teléfonos a la fábrica de muebles, la nuestra, que han venido físicamente, hemos tenido llamados, amenazas, venezolanos que trabajan conmigo me han dicho que vienen a cobrar la cuota: vienen, te amenazan, si no cumples con esa cuota, te amenazas con la familia o con lo que le puede pasar algo a la fábrica», relató.
Pero no es el único caso: contó que un amigo suyo, dueño de una fábrica de masas en Independencia, le pasó lo mismo. «Él pasó la plata, yo no. Hemos tomado la decisión de encararlos. Confiamos en la justicia, en las policías, que endurezcan las penas, que no haya puerta giratoria».
Escucha más sobre este tema en el análisis de ADN Hoy:
No obstante lo anterior, hace la distinción: «Los venezolanos llegaron acá con al intención de trabajar y ganarse la vida, escapando de este tipo de problemas por las mafias. Y estas mafias se están instaurando en Chile. Si no los encaramos por los medios, van a tomar posesión del país. Cuando ves que llegan autos sin patente, con la música a todo volumen, llegan camiones, gente pobre, sabes que hay algo raro. Se habló con la propietaria del terreno, se les dijo que los echen, todos les han dicho que los saquen, pero es un negocio muy bueno». Y de eso, al menos un año.
Los vecinos exigen que se haga control de los cités, porque «en el fondo, esconden ladrones».
«No pensamos nunca que había venezolanos acá. Los venezolanos que están acá son gente trabajadora, al revés: nos han ayudado a levantar las empresas post pandemia. Los colombianos tienen su iglesia acá», aclaró.
Las huellas dactilares de Ovimarlixion Josué Garcés Briceño fueron encontradas en el vehículo en el que se movilizaron los autores del crimen.
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