Caso Farmacias: Suprema revisó sentencia de TLDC y fija alegatos para el 24 de mayo
El fallo del Tribunal de Defensa de la Libre Competencia condenó a las cadenas Cruz Verde y Salcobrand por U$19 millones por la colusión de precioes en al menos 206 medicamentos.
La Sala Constitucional de la Corte Suprema con una integración especialmente conformada para esta causa sólo alcanzó a escuchar los argumentos de la sentencia del Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) en contra de las cadenas de farmacias Cruz Verde y Salcobrand que las condenó por U$19 millones a cada una por la colusión en los precios de al menos 206 medicamentos.
El máximo tribunal que estuvo presidido por el ministro Sergio Muñoz e integrada por los ministros Carlos Künsemüller, Guillermo Silva, Rosa Egnem y Juan Escobar, resolvieron dejar los alegatos de los abogados de las compañías y de la Fiscalía Nacional Económica para el próximo 24 de mayo.
El fallo del TDLC, emitido a fines de enero pasado, tuvo por acreditado que mas allá de toda duda razonable, la existencia de una colusión entre éstas cadenas y Farmacias Ahumada S.A., para alzar los precios de al menos 206 medicamentos, en el periodo comprendido entre diciembre de 2007 y marzo de 2008, ambos meses inclusive.
La sentencia estableció la existencia de este acuerdo ilícito mediante evidencia directa, relacionando y cruzando la información contenida en correos electrónicos y declaraciones de ejecutivos de las cadenas de farmacias y de laboratorios involucrados, con la información de los movimientos efectivos de los precios a público de cada uno de los medicamentos indicados en el requerimiento, y con la información de las cotizaciones que regularmente cada cadena farmacéutica hace de los precios de su competencia.
El debate de esta condena está cruzado por la querella criminal que interpuso Salcobrand por el delito de falso testimonio contra una de las testigos claves, Paula Mazzachiodi, quien fue clave en el acuerdo que alcanzó FASA con la Fiscalía Nacional Económica (FNE) para quedar fuera del proceso. La mujer era subgerente comercial de una de las firmas aludidas y fue una de las ejecutivas que reconoció la colusión y cuyo testimonio sirvió para que la cadena farmacéutica llegó a un acuerdo con la FNE para quedar fuera del proceso, previo pago de una multa de un millón de dólares.