María «Colo Colo» en Los Tenores Puertas Adentro: “El club es mi vida, mi alma y mi corazón”

En la edición de este sábado 5 de junio del programa “Los Tenores Puertas Adentro”, Aldo Schiappacasse entrevistó a una histórica hincha de Colo Colo.

Se trata de la señora María Fernández, de 86 años y seguidora del Cacique desde hace siete décadas y quien atesora la Copa Libertadores de 1991 entre sus mejores recuerdos.

«Soy hincha de Colo Colo desde febrero de 1950. Estaba internada en las monjas en Pedro de Valdivia frente al Estadio Nacional. Sentíamos siempre los fines de semana la bulla del estadio, pero no sabíamos de qué se trataba», contó quien es conocida como «María Colo Colo».

«Unos periodistas que conocí a los 15 años cuando empecé a trabajar me llevaron al Estadio Nacional a un partido de Colo Colo con la UC, y ahí supe cuál era la bulla. Me hice colocolina de inmediato».

La señora María dice que tiene muchos regalones entre jugadores albos, pero evoca a «Lucho Mena, Severino Vasconcelos, Javier Margas, el “Colo Colo” Muñoz y Hugo Rubio. Uno que me retaba cuando me veía fumando era Elson Beyruth».

«Yo recorrí Chile y Sudamérica siguiendo al equipo, soy fanática. Y como tenía un trabajo bueno, me las arreglaba para viajar. En bus hice como quince viajes por la Copa Libertadores«.

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«A nosotros nos robaron la Copa Libertadores en 1973 y ahora tengo rabia porque han pasado treinta años y no la hemos vuelto a ganar. Cómo puede ser eso».

Sobre la jornada de hace tres décadas, recordó que «partí en la mañana al Estadio Monumental. Estuve todo el día ahí para guardar el espacio a mis amigos».

«Y en la noche caminé de vuelta hasta mi casa al otro lado de Santiago. Las calles estaban llenas de gente celebrando».

«María Colo Colo» dijo que en un viaje en avión de esa campaña «nadie quería sentarse con Mirko Jozic, porque era muy apático. Y me sentaron al lado de él. Me habló muy poco, porque iba leyendo. Pero ahora hablo hasta con su hija por teléfono».

«Ese plantel era muy bueno. Cuando Jaime Pizarro tenía la copa me la acercó y dijo que la besara. Ellos sabían lo que yo hacía para seguirlos. Siempre me veían, pues yo llegaba a los hoteles para pedirles entradas de cortesía».

Sobre lo que significa Colo Colo para ella, hizo una confesión.

«Mis hijas y mis nietas se sienten un poco cuando digo que Colo Colo es mi vida, mi alma y mi corazón, porque me ha dado muchas alegrías».

«Tengo hasta un disco con el himno cantado por mí. Es un CD que quiero que pongan cuando me muera, cuando el cajón vaya cayendo al hoyo. Y tienen que poner la bandera de Colo Colo en mi ataúd».