Marcela Aguilar sobre Elicura Chihuailaf: «Este premio no es solo para él, sino para toda la oralidad mapuche»
La académica de la Universidad Diego Portales, y conductora de "Entre Líneas" en Radio ADN, conversó con Ciudadano ADN sobre el aporte del trabajo del nuevo Premio Nacional de Literatura como un necesario puente entre la chilenidad y la cosmovisión mapuche, definiéndolo como "poesía ecológica, en armonía con la naturaleza".
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La académica de la Universidad Diego Portales, y conductora de «EntreLíneas» en Radio ADN, Marcela Aguilar, conversó con Ciudadano ADN a minutos de saberse la noticia de que el poeta mapuche Elicura Chihuailaf fue escogido como el nuevo Premio Nacional de Literatura.
Según recordó, este año Elicura había «recibido mucho respaldo», pese a que los colectivos de autoras chilenas habían promovido que el Premio fuera para una mujer. «Nos pasamos los últimos meses hablando de mujeres poetas, como Carmen Berenguer, Rosabetty Muñoz y Elvira Hernández, lo que fue súper positivo porque empezamos a leer su poesía. Pensamos que este seria el año de las mujeres, había esa obligación de darle el premio nacional a una mujer, pero eso no le quita mérito a Elicura».
El poeta, escritor y oralitor, como él mismo se denomina en alusión a la tradición eminentemente oral de la poesía mapuche, es el primer premiado perteneciente a un pueblo originario. «Elicura, primero que todo, visibiliza la poesía mapuche. Él insiste mucho que es una especie de canal a través del cual se muestran estos poemas que vienen de sus ancestros, que lo aprendió porque su abuelo era lonko de una comunidad, sus padres y tías recitaban todos poemas alrededor de las fogatas, de una manera comunitaria. Eso es inseparable de su poesía», explicó Aguilar.
Entre sus temas recurrentes están la naturaleza y lo místico. «Habla de los sueños azules, del entorno donde habita el pueblo mapuche, con una relación con la tierra y sus elementos». La poesía de Chihuailaf puede ser leída como una «poesía ecológica, en armonía con la naturaleza».
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Su obra es prolífica, con 14 libros en español y mapudungún, «que también es una manera de visibilizar su lengua materna». Además, varios de sus poemas han sido difundidos a través de textos escolares, gracias a su sencillez. «Es fácil entrar en su poesía, que es muy musical, muy dulce, aporta una mirada sobre el pueblo mapuche que le da diversidad. Es una especie de filósofo de la cosmovisión mapuche».
Entre sus referentes, recordó la académica, Chihuailaf ha citado a autores de la tradición chilena como Manuel Rojas, José Santos González Vera o Nicomedes Guzmán, lo que muestra «que también tiene un vínculo con la gran narrativa chilena que habla sobre la historia del pueblo. Él entiende ese papel dentro de la literatura y de la cultura chilena. Él siempre se ha sentido una especie de portavoz de la cultura mapuche». Por eso, este premio «no es solo para él, sino para toda esta oralidad mapuche. Él lo siente así, no se ve como una figura única, sino en diálogo con las voces de sus antepasados».
Su nombre, Elicura, significa «piedra transparente», mientras Chihuailaf significa «neblina extendida por un lago». Con esa marca de nacimiento, «no podría ser otra cosa que un poeta».
Según Marcela Aguilar, el trabajo de Chihuailaf «es una manera de entrar en la cosmovisión mapuche de un modo estéticamente súper agradable, reflexivo, profundo, que ojalá que nos ayude. Ojalá este premio sea una manera de aproximarnos y no verlos como un otro distante al que no comprendemos, sino ver al pueblo mapuche con toda su riqueza. Debiera animarnos a construir».
«Los poderes del agua me llevan. Azul es el lugar adonde vamos». Citando el título y un verso de uno de los poemas más conocidos de Chihuailaf, Marcela Aguilar recordó que, con esta premiación, «ojalá todos pensemos en los colores de la naturaleza, hacia dónde nos movemos, nuestra relación con los ancestros. Todo eso podemos aprender de Elicura Chihuailaf».