Adiós a la Coca-Cola de siempre: esta es la razón por la que la empresa cambiaría la fórmula a raíz de Donald Trump

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sorprendió al anunciar que Coca-Cola aceptó su sugerencia de reemplazar el jarabe de maíz de alta fructosa (JMAF) por azúcar de caña en la versión estadounidense de su bebida más icónica. Sin embargo, la compañía aún no confirma oficialmente el cambio.

“He estado hablando con Coca-Cola sobre el uso de azúcar de caña REAL en la Coca-Cola en Estados Unidos, y han accedido”, escribió el mandatario en sus redes sociales.

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Según él, esta modificación mejoraría la calidad del producto: “Será una muy buena decisión por su parte. Ya verán. ¡Es simplemente mejor!”.

La respuesta de Coca-Cola fue medida. En un comunicado, la firma agradeció “el entusiasmo del presidente Trump” y adelantó que próximamente se compartirán más detalles sobre “nuevas ofertas innovadoras” dentro de su portafolio.

Sin embargo, también defendió el uso del JMAF, asegurando que es un edulcorante seguro, con un perfil calórico y metabólico similar al azúcar común, recogió BBC Mundo.

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Desde los años 70, el jarabe de maíz se ha mantenido como el principal endulzante de Coca-Cola en Estados Unidos, impulsado por subsidios al maíz y altos impuestos a la importación de azúcar. Su posible eliminación genera inquietud entre productores del llamado “cinturón del maíz”, tradicional bastión de apoyo a Trump.

John Bode, presidente de la Asociación de Refinadores de Maíz, advirtió que un cambio a azúcar de caña “costaría miles de empleos, reduciría ingresos agrícolas y aumentaría la dependencia de importaciones sin beneficios nutricionales”.

Aunque estudios no muestran grandes diferencias de salud entre ambos edulcorantes, la Coca-Cola elaborada con azúcar de caña —como la que se vende en México— es preferida por su sabor “más natural”.

Trump, conocido fanático de la Coca-Cola Light —que se endulza con aspartamo—, incluso instaló un botón en el Despacho Oval para recibirla con solo presionar. Pese a su entusiasmo, por ahora el supuesto cambio sigue sin confirmación oficial.