Senador Castro por ley corta de isapres: «Ni las isapres son pobres víctimas, ni tampoco la gente merece ser expulsada del sistema»

«Valoro que haya iniciativa». Las cuatro palabras que el senador Juan Luis Castro (PS), presidente de la comisión de Salud de la Cámara Alta, resumieron una discusión programada para esta jornada: la llamada ley corta de isapres, que debería resolver la crisis económicas en la que se encuentran las aseguradoras.

En ADN Hoy, la valoración que hizo el parlamentario significa «no dejarlas caer», pero hay algo que no cuadra: los plazos, pues el fallo que impuso Corte Suprema fue mayo. Aunque «el Gobierno va a pedir una prórroga a la Corte Suprema, que significa rebaja de plan, el cobro de excedentes; en fin, que tenga el instrumental, que es la ley».

El proyecto entró con urgencia simple, lo que permitirá «tener una transición ordenada. Lo que no puede pasar es que la gente que esté en isapres se cambie o se vaya a Fonasa, sino por una pulsión, una amenaza de que se van a acabar las isapres».

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Ahora bien, el Tribunal Constitucional observó las irregularidades de las aseguradoras en 2010; de entonces a esta fecha, las isapres «no le hicieron caso y después vino la escalada judicial», acotó Castro antes de ejemplificar que, en un punto el 95% de los trámites de la Corte Suprema tenían relación con ellas. «Ni las isapres son pobres víctimas, ni tampoco la gente merece ser expulsada del sistema. Lo que se trata es que el sistema siga existiendo, que se mejoren las reglas del juego a los usuarios, y que al mismo tiempo haya una mejora en fonasa que cubre al 90% de la población», dijo.

El Gobierno dispuso que las compañías informaran del total de contratos afectados en un plazo de seis meses, lo que a juicio del presidente de la comisión de Salud «es excesivo». No obstante ello, hay que distinguir: «La obligación de pagos sobre los contratos afectados, y el monto de la deuda. Espero que eso se clarifique hoy. No se puede navegar en la oscuridad».

Otro tema es «la gradualidad de cómo se devuelve la obligación económica, que tiene graduación. El plan de devolución lo revisarán expertos y quedará la aplicación. El inicio de la devolución está pensada para el próximo año, pero la rebaja de precios está pensada para cuando se tramite la ley».

Con todo, el ánimo de reformas del Gobierno es una discusión política que hoy tiene como contexto las votaciones de consejeros constitucionales. Para ello, cree que «tiene que haber ampliación de la base de apoyo del Gobierno. A mi juicio, hay que invitar a la Democracia Cristiana al Gobierno. Debió haberse hecho antes. Pueden tener diferencias legítimas, pero es un paso que se puede dar. Políticamente, parece necesario».

«Tiene que haber un arte para poder hacer las cosas para que ocurran, no para un testimonialismo. Ello requiere ponderación para flexibilizar y el Gobierno tenga éxito, no para que fracase. De eso se trata lo que pasó el domingo», cerró.