Los hechos que marcaron el caso Haeger, a cinco años del crimen

Este martes se desveló uno de los mayores enigmas de la crónica roja chilena. Durante cinco años, fue un misterio lo que había pasado con la contadora Viviana Haeger, quien se había casado con el ingeniero Jaime Anguita el 15 de julio de 1992

Tuvieron dos hijas y se mantuvieron casados por 18 años, hasta la desaparición de la mujer en Puerto Varas. Eso ocurrió el 29 de junio de 2010, Pasaron 42 días cuando se confirmó que Haeger estaba muerta: su cadáver fue encontrado en el entretecho de su propia casa.

Según la investigación, Anguita llamó a la policía para informar que su mujer estaba en la casa y muerta. Primero se habló de secuestro, pero al encontrar el cadáver se descartó la teoría. Luego surgieron dudas sobre un posible suicidio y una autopsia de octubre de ese año lo confirmó.  

En febrero de 2012 la fiscalía pide autorización para exhumar el cuerpo de Viviana, y sus resultados no son concluyentes, hasta que se conoció un análisis pericial solicitado en 2014. Se revisaron 71 informes policiales y los antecedentes de dos autopsias a través de la perito tanatóloga, Vivian Bustos: Haeger habría sido asfixiada por un tercero y recibido golpes en el cráneo.
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La hermana de la víctima, Rosemarie Haeger, había denunciado conductas extrañas en Anguita: “Lo llamé el fin de semana preguntándole ‘dónde estaba mi hermana’. Él me dijo ‘no te voy a poder responder, voy a tener que cortar la llamada’”. Raro.

Anguita siempre había negado su participación en los hechos hasta este martes 8 de diciembre: “Hubo un intento de asesinato a mi persona, planificado, que estaba en conocimiento de mi señora. Ella no soportó esta situación, esa noche ella no durmió y finalmente la llevó a quitarse la vida”, dijo Anguita a Canal 13 a comienzos de año.
 

Anguita, quien fue el principal sospechoso durante cinco años, también sostuvo que el plan para asesinarlo tenía como autor a un ejecutivo de la zona que tuvo una relación extramarital con su esposa a fines de los años 90 cuando se había separado.

La investigación arrojó que la muerte de Haeger fue violenta y esa “tercera persona” que interviene habría “ocultado” y “accedido” al cadáver en el período de esos 42 días que estuvo oculta en la buhardilla. Ahora se sabe que era un sicario contratado por Anguita. El cuerpo de Haeger apareció atado, así que la teoría del suicidio había quedado descartada.

Este martes se supo toda la verdad. Anguita le mintió a sus dos hijas e hizo el papel de viudo sufriente durante cinco largos años. Hasta hoy. Todavía no se sabe por qué cometió este macabro hecho.