Experto: La contaminación en ciudades del sur es como la de Santiago en los 90

Marcelo Mena, director del Centro de la Sustentabilidad de la Universidad Andrés Bello (UNAB) aseguró en entrevista con Ciudadano ADN que en 2012 hubo una buena gestión de episodios críticos de contaminación en Santiago, lo que permitió disminuir las cifras. Sin embargo, hay retraso en la aplicación de estas normas en ciudades del sur del país, donde el smog llega a doblar las cifras de la capital.

Las preemergencias de material particulado PM2,5 se redujeron en un tercio, mientras que las alertas ambientales bajaron en 40% gracias, según Mena, a una mejor gestión, al prohibir el uso de la leña y declarar alertas preventivas cuando había malos pronósticos meteorológicos.

"Fue una decisión muy inteligente ya que es mucho más fácil y efectivo apagar las chimeneas de las personas cuando la ventilación está mala, que echarse encima a un 40% de la población vehicular (medida) que ya sabemos que no es tan efectiva", afirmó.

Sin embargo, en las principales ciudades del centro-sur de Chile, como Temuco, Osorno, Rancagua y Chillán, se encuentra casi el doble del porcentaje del smog que hay en la capital. El principal culpable es la calefacción a leña, un tema no tan simple, pues hay un desafío multidisciplinario que pasa transversalmente por el tema social, cultural y económico dentro de la población sureña.

"Hay que reducir la contaminación a mas o menos 50 por ciento, y eso es un desafío importante. Lo que tienen las ciudades del sur es como Santiago en los años 90. Acá avanzamos mucho, hicimos los ajustes necesarios para la industria, para los autos, para la calefacción. Pero eso no se ha hecho en el sur", añadió Mena, quien afirmó que en el sur todavía hay industrias y empresas internacionaes que funcionan con carbón y leña.

"La gente en el sur está acostumbrada a un estándar de calefacción mejor, el combustible esta fácilmente disponible y de muy bajo costo, los ingresos de las personas del sur son más bajos que la zona central y la disponibilidad de combustibles más limpios es escasa. Entonces es un desafío importante que está abordando el gobierno a través de un agresivo programa de recambio de estufas", explicó Mena.