Diego Poblete sigue grave tras infección en la zona del trasplante

En estado grave, bajo el efecto de sedantes y conectado a un ventilador mecánico se encuentra el niño Diego Poblete, quien el pasado 23 de marzo fue sometido a un trasplante de hígado en el Hospital Luis Calvo Mackenna.

El padre del pequeño de 12 años, Luis Poblete, señaló a ADN Radio Chile que surgieron hongos en el 3% de la zona de la operación, y que ello tiene a su hijo muy delicado.

"Diego está en un cuadro de extrema gravedad por esa infección que tiene en la operación, que fue detectado el día viernes. Durante el transcurso de la noche pasó a pabellón, uno para hacer aseo quirúrgico y lo otro para ver su estado y cómo está evolucionando el hígado, porque el día miércoles hubo un leve rechazo, que estaba controlado. Ahora la prioridad número uno es la infección que tiene y que no se empiece a expandir, porque si se expande se complica más la situación de Diego", expresó.

En tanto, el director del Hospital Luis Calvo Mackenna, Osvaldo Artaza, admitió que la situación es complicada y se enmarca dentro del post operatorio de un trasplante como el que se le realizó a Diego Poblete, subrayando que no sabe si es el momento más difícil o no.

"El niño está grave y probablemente lo siga en el tiempo que venga. Es la segunda infección que tiene y no va a ser la última", señaló, agregando que "es propio de la cirugía de este tipo".

Artaza explicó que el riesgo continuará "mientras no saquemos al niño de los tubos y la cantidad de distintos artefactos con que lo estamos invadiendo, y además no mejores sus condiciones de defensa. Siempre hemos tenido (estas complicaciones) como parte de la evolución de un trasplante en un niño que ha tenido todo el deterioro que tuvo Diego con su hepatitis fulminante".

El especialista enfatizó que la gravedad de Diego puede mantenerse e incluso empeorar, y sostuvo que sus padres saben que siempre está la posibilidad de que el pequeño no sobreviva.

"Yo no sé cómo un papá puede soportar tantos días, y no son sólo días van a ser semanas, donde cada día pareciera que es un calvario que no termina nunca. Así son este tipo de cirugías y siempre está el riesgo del fallecimiento. Los resultados si uno ve las estadísticas son buenos, hay un 80% pero siempre existe el 20%", señaló.

"Le hemos dicho con mucha franqueza y a veces con una franqueza muy descarnada, les vamos comunicando las complicaciones y es evidente que no son buenas noticias para nadie", remarcó, señalando que "no puedo decir que ésta vaya a ser la última dificultad con Diego".