Angela Merkel recibió una despedida con honores militares a días de dejar su cargo en Alemania

La Bundeswehr, las fuerzas armadas de Alemania, despidió con honores militares a la canciller Angela Merkel. La gobernante recordó algunos de los desafíos que tuvo en el ejecutivo federal. En el acto llamó a defender la democracia contra el odio, la violencia y la desinformación.

La saliente mandataria germana rechazó a quienes niegan el conocimiento científico, difunden teorías de conspiración y agitación. Merkel aseveró que contra esos intentos se debe ser vehemente, en un acto desarrollado en Berlín. La ceremonia conocida como Zapfenstreich es el más alto honor que ofrecen las fuerzas armadas.

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La canciller enfatizó en su discurso que «nuestra democracia también se nutre del hecho de encontrar su límite ahí dondequiera que el odio y la violencia se consideren un medio legítimo para perseguir intereses propios». Entre los asistentes se encontraban el presidente Frank-Walter Steinmeier y el futuro canciller Olaf Scholz.

Merkel le deseó al venidero gobierno «todo lo mejor y una mano afortunada y buena suerte». La gobernante destacó lo necesaria que es la cooperación global. En su alocución recalcó que «son indispensables las instituciones internacionales y los instrumentos multilaterales para poder afrontar los grandes desafíos».

Deutsche Welle detalla que para la canciller los nuevos desafíos son «el cambio climático, la digitalización, los refugiados y la migración». Merkel pidió que las personas «siempre vean el mundo a través de los ojos del otro en el futuro, también, para que también perciban las perspectivas a veces incómodas y contradictorias de la otra persona, para trabajar y equilibrar los intereses».

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