Felipe de Borbón pactó con su padre que saliera de España ante investigaciones

Su huida tuvo la venia de la realeza y la presidencia. Felipe de Borbón, el actual rey, acordó con su padre Juan Carlos, el rey benemérito, su salida del territorio español ante las investigaciones judiciales. Las fiscalías de Suiza y España indagan al exjefe de la monarquía hispana por eventuales delitos tributarios y fiscales.

Los máximos representantes de la monarquía no lograron un acuerdo para evitar que el daño que deja el escándalo en las cuentas bancarias en paraísos fiscales. El gobierno de Pedro Sánchez estuvo informado de las conversaciones, pero fue Felipe VI quien autorizó el escape de Juan Carlos I hacia Portugal.

El mayor de los Borbón abandonó el Palacio de La Zarzuela el pasado domingo y, antes de cruzar la frontera española, pasó la noche en la casa de su amigo Pedro Campos. El País informa que el exmonarca hispano se dirigió hasta la ciudad de Porto y en esa urbe habría tomado un avión, sin que se conozca su destino.

Una de las salidas que evaluó la monarquía fue la regularización del patrimonio de Juan Carlos de Borbón. El problema era que la cantidad a pagar, sobre los 60 millones de euros, estaba fuera de las posibilidades del rey emérito. Pero nada garantizaba que luego no se le acusara de ocultar propiedades a nombre de terceros.

Los delitos fiscales en ese país prescriben a los cinco años, un período no tan largo para vivir lejos. Tal vez eso ayudó a pactar la salida consensuada entre padre e hijo, pero evaluando cómo vivirá en el futuro. Los cercanos a Juan Carlos de Borbón aseguran que acudirá a los tribunales si es requerido y que su salida es sólo temporal.

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