Estudio reveló discriminación en controles de identidad: mujeres, extranjeros y personas de comunas vulnerables son los más fiscalizados

Tras la muerte del joven malabarista Francisco Martínez en la localidad de Panguipulli el viernes pasado, luego de ser baleado por el sargento segundo de Carabineros, Juan González, se reinició el debate en torno al control de identidad, que se les otorgó a las Fuerzas de Orden y Seguridad en 2016.

Fue en torno a esta discusión que la Universidad Diego Portales desarrolló un estudio sobre cómo funciona este procedimiento en el país, utilizando como base la información proporcionada por Carabineros de Chile.

La investigación reveló que existe una marcada discriminación estadística con respecto a los grupos de la población que son más fiscalizados.

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«Los controles de identidad no se distribuyen democráticamente en nuestra sociedad, sino que tienden en focalizarse en ciertos grupos, sobre todo en personas jóvenes entre 20 y 39 años. Se puso establecer que habría un uso discriminatorio estadísticamente hablando en contra de mujeres, extranjeros y personas que habitan en comunas de mas bajos ingresos, en comparación con las que habitan en comunas de más altos ingresos», señaló Mauricio Duce, académico de la casa de estudios y uno de los autores del estudio.

El informe dejo entrever además el bajo impacto y eficacia que tienen este tipo de medidas en la reducción de la delincuencia, ya que de acuerdo a los datos aportados por la institución durante el año pasado se realizaron cerca de 7 millones de controles de identidad en el país, lo que no ayudó a que las cifras de detención durante delitos fragantes de mayor connotación disminuyeran en un 7,5%.