El fallido antecedente sudamericano de la anunciada «Superliga Europea»

Este domingo la UEFA y las federaciones de fútbol de España, Italia e Inglaterra respondieron con fuerza por medio de un comunicado al anuncio hecho por doce grandes clubes de esos países de la creación de la denominada Superliga Europea, una competencia cerrada y fuera de la oganización histórica del fútbol, por lo que también la FIFA rechazó esta posibilidad.

Atlético de Madrid, Barcelona, Real Madrid (por la Liga), Milán, Inter de Milán, Juventus (por el Calcio), Arsenal, Chelsea, Liverpool, Manchester City, Manchester United y Tottenham Hotspur (por la Premier League) son los doce clubes rebeldes que han desatado una verdadera guerra en el fútbol, con fuertes declaraciones de lado y lado, y la amenaza de que los seleccionados de esos clubes no podrían jugar las clasifucatorias mundialistas.

Pero el deseo de desligarse de las oganizaciones del balompié en busca de más recursos no es algo nuevo. De hecho por estos lados, en Sudamérica, fue anunciada la misma idea en febrero de 2016. Y tal intención no prosperó.

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Fueron quince clubes los que hace poco más de cinco años anunciaron el nacimiento de la Liga Sudamericana de Clubes de Fútbol. Y entre esos rebeldes sudamericanos ante la Conmebol  estaban por Chile los tres clubes más populares de nuestro país: Colo Colo, Universidad de Chile y Universidad Católica.    

Albos, azules y cruzados se sumaron a otras doce instituciones para anunciar en Montevideo la creación de esa Liga, que al fina no seo concretó. Los otros miembros de este grupo eran Boca Juniors, River Plate, San Lorenzo, Racing (por Argentina), Liga de Quito (por Ecuador), Olimpia, Cerro Porteño (por Paraguay), Melgar, Sporting de Cristal (por Perú),  Nacional, Peñarol y River Plate (por Uruguay).

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Estos quince firmantes del acta constitutiva dejaron abierta la puerta a la participación de más clubes, y en la cita de anuncio -organizada por Peñarol– se dijo que los «15» esperaban un aumento de los montos que la Conmebol distribuía por los derechos televisivos de la Copa Libertadores y de todos los otros torneos internacionales promovidos por la entidad con sede en Asunción.

También pedían la eliminación del 10 % que cada equipo tenía que abonar a la Conmebol por venta de localidades en los partidos de las diferentes copas internacionales.

Habrá que ver si la Superliga Europea sigue el mismo camino de la fracasada Liga Sudamericana de Clubes de Fútbol.