«Canciones prohibidas» en tiempos de coronavirus: una selección de Ricardo Martínez

Hay canciones que están virtualmente prohibidas hoy. Por sus letras alusivas a la cercanía, al contacto físico o al ejercicio de besarse y abrazarse, todo a lo que aluden es imposible de concretar en tiempos de coronavirus y de estricto aislamiento social.

No es de esperar que gran parte del cancionero pop toque estos temas, porque el amor, gran tema de la música masiva, «tiene mucho que ver con el tacto, la calidez y el hecho de que somos animales sociales que necesitamos del otro», según apuntó el académico de Literatura Creativa UDP, Ricardo Martínez en una nueva entrega de «Letra y música», la columna musical de Ciudadano ADN. El columnista también recordó las reflexiones de la primatóloga Isabel Behncke, quien nos recuerda que «necesitamos el contacto, por lo tanto la distancia social nos afecta en términos de que nos sentimos muy extraños y hay que hacer un esfuerzo doble o triple para poder sobrellevar esto».

La revisión partió con dos títulos que suenan difíciles de concretar por estos días: «Juntos» de Paloma San Basilio, para luego seguir con «Bésame mucho» de Lucho Gatica, compuesta por “la maravillosa Consuelo Velázquez” de quien recomendó una de sus presentaciones en vivo. La autora “fue a tocar el piano en Siempre en Domingo y se manda un show extraordinario, parece heavy metal y todo el público queda para adentro con su interpretación”.

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También suena incorrecto en este periodo «Acércate más» de Nat King Cole, compuesta por el cubano Osvaldo Farré y claro ejemplo del yambo, métrica musical en la que se acentúa suave en la primera nota y fuerte en la última nota. «El bolero cubano es muy percutido, a diferencia del mexicano que es muy orquestado», consignó Martínez.

“Tú y yo” de Emmanuel, composición de Paolo Barabani, Enzo Ghinazzi y Donatella Milani, es una muestra del influjo de la canción italiana en el mexicano. Emmanuel «hacía pirateos, versionó una cantidad de canciones de Lucio Dalla, es uno de los grandes cantantes mexicanos con una influencia italiana marcada, hasta el pelo es tipo Gianni Bella», según el columnista.

Tampoco es por estos días es posible seguir el ejemplo de «Agárrense de las manos» de José Luis Rodríguez, obra de Chema Purón, quien «le hizo esta canción pachanguera y fiestera en una época en que la cumbia y la música del norte de Sudamérica pintaba mucho en las fiestas».

Otra actividad no recomendable en medio del aislamiento social es salir a bailar. «Bailar pegados» de Sergio Dalma, instaló a mediados de los años 90 «esta idea de ‘que vuelvan los lentos’, cuando en esa época la gente se ponía a bailar en grupo, tiraban la ropa al suelo y hacían como una ronda».

En un registro más actual, Martínez programó «Abrázame» de Camila Gallardo y, como nota final más optimista, «Cuando nos volvamos a encontrar» de Carlos Vives con Marc Anthony, un título que nos invita a tener esperanza en «que pueden mejorar las cosas en el mediano plazo». Para Martínez, Vives es algo así como «el Morgan Freeman de la música, cuando lo ponen en un feat. siempre arregla todo».