Alcalde de Lebu tras toma de la municipalidad: «El diálogo por si solo no va a solucionar el problema»

Un grupo de comuneros mapuche lafkenche se tomó la municipalidad de Lebu, en el sector costero de la región del Biobío, durante el lunes. Cristián Peña, el alcalde, estaba en su oficina cuando escuchó un ruido extraño: bajó al primer piso y entonces lo sacaron del inmueble. Pero fue poco el tiempo que estuvo afuera: entró  minutos después, conversó con los involucrados y hacia la tarde de la jornada, la toma fue depuesta. De eso y más habló este martes en ADN Hoy.

El grupo pedía la libertad de los llamados presos políticos mapuche. La forma para resolver el conflicto impulsada por el Gobierno actual ha sido el diálogo, pese a las amenazas reiteradas. Pero para el alcalde Peña, «la cosa no parte solo por esperar el diálogo».

«La fuerza por sí sola no va a solucionar el problema; tampoco la presencia del Estado en el territorio; tampoco soluciona el problema el diálogo por sí solo. La gran diferencia que hemos tenido los alcaldes con los gobiernos anteriores es que se creía que solo con la fuerza se solucionaba el problema, pero no, y eso significó una escalada de violencia. Tiene que ser un plan integral de seguridad, de presencia del Estado en el territorio, diálogo político, justicia y reparación a las víctimas. Debe haber un trabajo integral, porque el diálogo por sí solo no lo es», planteó el edil.

[dps_related_post ids=»4998028,4996802″]

A su juicio, la situación es grave al menos desde el 2012. Pero «en los últimos días hemos visto un aumento de los actos violentos, quizás como una forma de marcar territorio, de hacerse presente, de mostrar fuerza», dijo. Pero para enfrentarlo se requiere una solución multidimensional.

«El camino es, primero, asegurar la seguridad en el territorio de forma eficiente. Eso tiene que ir mezclado con todo lo demás. Son múltiples causas que llaman a enfrentar la situación de forma integral. Se ven políticas tardías e ineficientes de gobiernos anteriores que nos han llevado a momentos dificilísimos donde la violencia está presente en todos los aspectos», desarrolló.

En esa línea, hizo la distinción entre «quienes quieren dialogar» y aquellos «delincuentes metidos en el robo de madera y el narcotráfico»: «Mientras discutimos esto, en Lebu había un grupo de comuneros que no querían dialogar, mientras que en la provincia de Arauco hay otros que llevan años esperando para dialogar».

[dps_related_post ids=»4985288,4985242″]

«Es distinto aceptar las peticiones de aquellos que son violentos y que muchas veces no les interesa que esto se solucione. Hay que entender el conflicto en Arauco: es mucho más amplio que lo que se imaginan, más amplio que el incendio de unas cabañas. Es mucho más que eso. Para asegurar el trabajo en el territorio hay que capacitar a las policías y asegurar el actuar. Lo que se ha hecho en los últimos años no ha resultado. No es posible que quemen 11 cabañas y no haya ningún detenido. No es posible que durante años hayan habido ataques y no haya ningún detenido. Existe una ineficiencia por parte de las policías y del ente persecutor para no tener resultados. Algo está mal ahí y el Estado debe hacerse cargo de perseguir, de investigar y de hacer inteligencia, porque no resultó, no porque lo digo yo, sino porque son los hechos», concluyó Peña.