Subsidio Maternal: cómo acceder a este aporte y dónde hay que tramitarlo
Esta ayuda que llega desde el Estado es para ayudar a costear lo que implica un embarazo, y hay que cumplir algunos requisitos para recibirla.
El Subsidio Maternal es un beneficio que entrega un monto en dinero que se paga en reemplazo de la renta de la trabajadora embarazada y cónyuges de hombres que trabajen.
Y para concretarlo hay que cumplir con algunos requisitos establecidos en la ley y tener derecho a la licencia médica.
Este aporte fue pensado para ayudar a cubrir parte de los variados gastos que implica el periodo de gestación para las familias, en especial las de bajos recursos.
Comienza a ser cancelado desde el quinto mes de embarazo, pero una vez asignado es pagado retroactivamente y por todo el periodo de gestación.
Y al igual que el Subsidio para Pagar el Agua Potable debe ser tramitado en la municipalidad correspondiente al hogar en el que se viva.
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Requisitos para el Subsidio Maternal
El Subsidio Maternal está garantizado a gestantes que pertenezcan al 60% de familias de menores recursos del país de acuerdo al Registro Social de Hogares.
El pago considera el periodo completo de embarazo si no han sido percibidos otros beneficios incompatibles al momento de postular que generen una disminución en el monto del pago final.
Para recibir el Subsidio Maternal no se debe contar con otros ingresos o derechos similares.
Entre ellos están la Asignación Familiar, ingresos por concepto de trabajo y/o derecho al prenatal y postnatal, y el Subsidio Familiar.
La embarazada debe ir al municipio correspondiente a su domicilio con la agenda de controles prenatales, carné de identidad, certificado de residencia y certificado de embarazo.
El certificado médico debe acreditar el quinto mes de embarazo y tiene que ser emitido por el Servicio de Salud Pública o por un facultativo privado (médico o matrona).
Y ese certificado además tiene que ser visado por la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez (Compin).
Las trabajadoras dependientes deberán contar con seis meses de afiliación previsional en la AFP antes del día del inicio de su licencia médica.
Y también con tres meses de cotizaciones dentro del mismo periodo de tiempo, además de contrato vigente.
