Política y pop: «Letra y música» revisó una selección de «cantantes-candidatos»

El lanzamiento de la campaña a la Presidencia de Estados Unidos del rapero Kanye West resultó descabellada para muchos, pero no es la primera vez que la música popular se vincula de forma así de directa con la política. En «Letra y música», la columna musical de Ciudadano ADN; el académico de Literatura Creativa UDP, Ricardo Martínez, revisó varios casos de cantantes-candidatos, con sus temas más emblemáticos. Partiendo, por cierto, por el propio West.

«La historia de los cantantes metidos en luchas y movimientos sociales es enorme», recordó Martínez, a partir de figuras del cancionero nacional como Violeta Parra o Quilapayún, e incluso nombres actuales como Manuel García o Ana Tijoux, cuyo compromiso político se potenció después del 18 de octubre, «pero otra cosa es ponerse el traje de candidato».

Kanye West, «Stronger»: El controvertido rapero estadounidense, recordó Martínez, ya había anunciado su candidatura hace varios años, y se ha caracterizado por dar a conocer, de forma bastante estridente, sus opiniones políticas a través de sus redes sociales. «Es un flirteo desde siempre».

Rubén Blades, «Pedro Navaja»: El panameño participó en las elecciones presidenciales de su país en 1994, quedando en tercer lugar, con el 20% de los votos. La canción -inspirada en «Mack the Knife», de Bertold Brecht y Kurt Weill- pertenece al disco «Siembra» (1978), realizado en conjunto con Willie Colón, y es el álbum de salsa más vendido de la historia.

Youssou N’Dour, «7 seconds» (ft. Neneh Cherry): El senegalés, que logró fama mundial con esta canción a mediados de los 90, intentó establecer una candidatura presidencial en su país en 2012, aunque falló por las firmas. Su repercusión comenzó cuando Peter Gabriel, siempre vinculado a las músicas del mundo, lo invitó a trabajar con él, llegando incluso al recital Amnistía, a fines de la década de 1980.

Domenico Modugno, «Volare»: «Un himno», que incluso fue la ganadora del Festival de Viña del Mar en 2010, versión en que el certamen buscó «la canción del siglo XX». En su libro «Clásicos AM», Martínez señala al autor como el «Huracán Modugno», quien impulsó una «transformación radical de lo que era hacer música romántica»: su performance teatral marcó para siempre a los baladistas. El creador de la canción, primera en ganar el Grammy, fue elegido parlamentario por el Partido Radical Italiano desde 1987 a 1992.

Wyclef Jean, «Perfect Gentleman»: El rapero haitiano intentó ser candidato presidencial en 2010, pero su candidatura fue rechazada. Ampliamente conocido en Estados Unidos, llegó incluso a tener un featuring con la colombiana Shakira.

Palito Ortega, «Prometimos no llorar»: Pese a la fama del argentino en su tierra natal, según Martínez, «en Chile no se capta el impacto que tiene allá». Junto a Sandro y Leo Dan son las tres figuras claves previas al surgimiento del rock de los años 60, con una música «muy visual» que sirvió como banda sonora de varias películas. Ortega está ligado al Partido Justicialista, y de la mano de Carlos Menem llegó a ser gobernador de la Provincia de Tucumán entre 1991 y 1995. En los últimos años, ha destacado por ser una figura clave en el repunte de la salud de Charly García, con quien lo une una fuerte amistad.

Miroslav Skoro, «Sude Mi»: Este cantante de Croacia fundó un movimiento llamado Homeland Movement, con el que fue elegido parlamentario en 2007. Su música, conocida como Tamburitza, ocupa instrumentos de cuerda muy característicos de la zona de Europa del Este hacia el Mediterráneo.

Rocío Banquells, «Este hombre no se toca»: Clásica actriz de telenovelas mexicanas en los 70 y 80, se lanzó como cantante en 1985, obteniendo su mayor fama en los años 90. En 2o18 fue candidata a diputada por Ciudad de México por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), ligado a la izquierda.

Florcita Motuda, «Brevemente… Gente»: El hoy diputado por el Frente Amplio «ya para la campaña del plebiscito de 1988 se estaba poniendo la banda presidencial», tal como recordó Martinez. Desde siempre vinculado a la política, ha llevado su estrafalario estilo a lugares tan serios como el Congreso. Otro de sus últimos logros musicales fue ser el segundo chileno -tras Fernando Ubiergo- en ganar el festival OTI, en 1998, «cuando ya no se transmitía por televisión, y ya no era lo que fue en los años 80».

Otros que han coqueteado con la política son el histórico integrante de Illapu, Andrés Márquez, aunque no logró la diputación que intentó lograr con el PPD en 1997. Más éxito tuvieron Amaro Labra, de Sol y Lluvia, hoy diputado por el Partido Comunista; René De la Vega con su exitosa reinvención desde «Chica rica» a la alcaldía de Conchalí; y el exgalán de teleseries, exalcalde de San Joaquín y exdiputado Ramón Farías, también destacado por su inolvidable hit «Tímida». Como bonus track, la columna revisó la música de Frank Zappa, un apasionado por la política y opositor al conservadurismo de su país, y la dudosa incursión musical de la recordada actriz porno Cicciolina.