Brasil: la grave ola de incendios forestales alcanza a un parque nacional de Brasilia
El Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales contabilizó 55.517 siniestros en lo que va de septiembre. En la región de la capital ya fueron arrasadas 2.000 hectáreas.
Brasilia de Brasil
La ola de incendios forestales en Brasil alcanzó al Parque Nacional de Brasilia, en donde fueron arrasadas 2.000 hectáreas de la reserva. El Supremo Tribunal Federal (STF) liberó el uso de créditos extraordinarios para combatir los siniestros, a los que el magistrado Flavio Dino calificó de una “pandemia”. El mandatario del gigante sudamericano, Lula da Silva, manifestó que “el gobierno federal está actuando junto con el Cuerpo de Bomberos para ayudar en el combate de las llamas”. El fuego en los alrededores de la capital se inició este domingo, en una zona que enfrenta una grave sequía.
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Flavio Dino del STF manifestó este lunes que el gobierno federal podrá disponer de los créditos extraordinarios “sin cálculos de techos ni metas fiscales, exclusivamente”. El magistrado de la suprema de Brasil recalcó que “no podemos negar el máximo y efectivo socorro a más de la mitad de nuestro territorio”. En lo que va de septiembre el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE) registró 55.517 incendios forestales en todo esa nación.
Los datos satelitales del INPE detectaron que en algo más de dos semanas de septiembre ya se superaron los incendios forestales contabilizados durante agosto. La emergencia se ve impulsada por el cambio climático que provoca el calentamiento global, en un país que enfrenta la peor sequía desde que existen mediciones. Solamente en la capital Brasilia acumulan ya 145 días sin lluvias, lo que se combina con niveles mínimos de humedad en la zona.
G1 de Globo consigna que el sector norte de la Capital Federal amaneció este lunes cubierta por una densa neblina, producto del humo que deja el incendio del parque nacional. Debido a la mala calidad del aire la Universidad de Brasilia y al menos 17 colegios públicos decidieron suspender sus clases, a la espera del control del siniestro. En algunas zonas los voluntarios y residentes intentan frenar a las llamas, para evitar que se acerquen a las viviendas.