Muere Carmen Berenguer, destacada poeta, cronista y artista visual chilena: ganó importante y prestigioso premio internacional en el 2008
La escritora dejó de vivir a la edad de 78 años. Tuvo también una gran influencia en Las Yeguas del Apocalipsis.
Fotógrafo: Rodrigo Fernández
Hoy, 16 de mayo, se confirmó la triste noticia del fallecimiento de Carmen Berenguer, una destacada poeta, cronista y artista visual chilena nacida el 9 de septiembre de 1946 en Santiago. Su carrera literaria la posicionó como una figura prominente en la poesía chilena desde la década de los 80, siendo galardonada con el prestigioso Premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda en 2008.
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La poeta creció en un entorno modesto, hija de padres separados, y fue criada por su madre y una tía abuela en viejas pensiones y barrios populares de Santiago durante los años 40 y 50. Fue en su juventud cuando descubrió su vocación poética, sintiendo la necesidad de expresar “aquello que no podía comunicar por otros medios”.
Antes de su incursión en la publicación de poesía, Carmen Berenguer vivió en Estados Unidos en dos ocasiones debido a los estudios de su esposo, el científico Carlos Jerez. La primera vez fue en 1969, cuando acompañó a su esposo a Iowa City para que realizara su doctorado. En 1979, volvieron a viajar, esta vez a Nueva Jersey, no solo por los estudios de su marido sino también para “arrancar del horror de Chile”.
Una voz importante durante la dictadura
En los años 80, la cronista emergió como una voz fundamental en la poesía chilena en plena dictadura de Augusto Pinochet. Participante activa de la bohemia de la época, era habitual verla en el bar Jaque Mate, un lugar de encuentro para artistas y músicos.
Ella misma recordó: “Me la pasaba ahí. El Jaque Mate era un bacanal. Lo pasábamos el descueve. Llegaba todo el mundo: Los Prisioneros, el Beto Cuevas, el rock, los muralistas, llegaban todos… En el Jaque Mate se discutían las performances que hacíamos. En ese sentido, reemplazaba la academia, que se había trasladado del Mulato Gil al Jaque Mate”.
Fue en esos años que Carmen Berenguer se consolidó como una figura esencial en el panorama poético chileno con la publicación de tres obras clave: Bobby Sands desfallece en el muro (1983), un homenaje al poeta irlandés que murió en una huelga de hambre; Huellas de siglo (1986), y A media asta (1988).
Colaboró con las Las Yeguas del Apocalipsis
Durante la presentación de esta última obra, el dúo Las Yeguas del Apocalipsis realizó una de sus primeras performances, y la poetisa, cercana a este colectivo, participó en acciones de arte como Refundación de la Universidad de Chile (1988), Estrellada San Camilo (1989) y Tu dolor dice: minado (1993).
Además de su trabajo poético, Carmen Berenguer fue editora de las revistas Hoja X Ojo (1984) y Al Margen (1986), y organizadora del Primer Congreso de Literatura Femenina en 1987. En octubre de 1989, representó a Chile en el Festival Internacional de Poesía en Estocolmo, Suecia, evento organizado por el poeta Sergio Badilla Castillo y la escritora Sun Axelsson.
Durante los años 90, continuó su labor literaria con la publicación de Sayal de pieles y Naciste pintada, este último inspirado en cartas de presidios y testimonios de prostíbulos. En el siglo XXI, siguió obteniendo reconocimientos, destacando su Premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda y varias nominaciones al Premio Nacional de Literatura.
Finalmente, Carmen Berenguer también se desempeñó como presidenta de la Sociedad de Escritores de Chile en 2012, y fue reelegida como vicepresidenta en 2015. Su lucha contra el cáncer la mantuvo alejada de las actividades públicas por un tiempo, pero regresó con fuerza al mundo literario, siendo nominada al Premio Nacional de Literatura en 2016 y 2020. Su legado sigue vivo en las numerosas antologías y traducciones de su obra.
