Elecciones 2021: ¿qué implica el segundo y último tramo de campaña?

Este viernes 22 de octubre comienza el segundo y último tramo de la campaña para las próximas elecciones presidenciales, senatoriales, de diputadas y diputados, además de los Consejeros Regionales. 

Aquí te preguntas: «¿pero cómo, si hemos visto los debates y ya hemos escuchado en la radio a candidatas y candidatos hacer publicidad por ellos mismos, además de alguno que otro brigadista en la calle?». Hay una razón y aquí te la explicamos.

La ley

La propaganda electoral es «todo evento o manifestación pública y la publicidad radial, escrita, en imágenes, en soportes audiovisuales u otros medios análogos, que promuevan a una o más personas o partidos políticos constituidos o en formación, con fines electorales», según explica el Servel en su sitio web, citando a le ley que regula esta clase de actos.

La misma ley establece dos periodos de realización de campaña y dos soportes donde llevar a cabo esto. Es decir, hay una distinción temporal y otra material.

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Tiempo

La primera parte de la campaña comienza 60 días antes de la elección (el 22 de septiembre pasado). Desde esa fecha están autorizadas las propagandas por medio de prensa y radioemisoras, y por activistas o brigadistas en la vía pública mediante el porte de banderas, lienzos u otros elementos no fijos, o la entrega de material impreso u otro tipo de objetos informativos.

La segunda parte de la campaña comienza 30 días antes, es decir, desde este 22 de octubre. Y además de los soportes mencionados anteriormente, está permitido también el uso de espacios públicos o privados autorizados.

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Allí entra la franja televisiva: todos los días y hasta el próximo 18 de noviembre, se verán en dos secciones: a las 12:40 y a las 20:40 horas, la que irá variando entre presidenciales y parlamentarias día a día.

Desde este viernes, y según establece la ley, comenzarás a ver propaganda en:

• lugares calificados como plazas, parques u otros espacios públicos autorizados por el Servicio Electoral;
• espacios privados, mediante carteles, afiches o letreros, con autorización del propietario, poseedor o mero tenedor del inmueble, cuyas dimensiones no superen los seis metros cuadrados.

Qué es y qué no es propaganda electoral

La propaganda electoral es la promoción de candidaturas por medio de carteles, afiches o letreros en los espacios mencionados más arriba; además del uso de medios de comunicación masivos (radios, prensa escrita y digital). Las redes sociales también son considerados soportes para la publicidad, junto con la entrega de volantes y los brigadistas con banderas en las calles.

Lo que no es propaganda electoral es «la difusión de ideas o de información sobre actos políticos realizados por personas naturales», como son, por ejemplo, un debate; las actividades que autoridades públicas realicen en el ejercicio de su cargo; y las actividades habituales no electorales propias del funcionamiento de los partidos políticos constituidos o en formación.

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Ojo con los límites

Si hay propaganda fuera de los plazos mencionados anteriormente, las sanciones consideran multas entre 10 y 200 UTM. También la ley considera la propaganda ilegal si esta existe en radioemisoras que no hayan informado sus tarifas en el mismo Servicio Electoral, al igual que la prensa escrita.

En los espacios públicos como parques y plazas no puede haber propaganda que supere los dos metros cuadrados. Como condición de existencia, además, esta misma propaganda no puede destruir, modificar, alterar o generar algún daño «de manera irreversible los bienes muebles o inmuebles que allí se encuentre».

La publicidad en espacios privados solo pueden ser llevadas a cabo mediante «autorización escrita del propietario, poseedor o mero tenedor del inmueble en que se encuentra». Además, esta no puede superar los seis metros cuadrados.

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En redes sociales la propaganda debe regirse por el límite de tiempo establecido para la prensa escrita y las radios. Pero mucho ojo: no es propaganda electoral la manifestación de una preferencia electoral hecha desde cuentas personales. La delgada línea está en que estas expresiones no deben ser pagadas. Corresponden, finalmente, a parte de la libertad de opinión.

También está prohibida la publicidad en cines, aeronaves o elementos de desplazamiento aéreo (drones), vehículos de transporte de pasajeros, igual que las paradas de transporte público, estaciones de ferrocarriles o Metro, postes de alumbrado, tendido eléctrico, telefónico o de televisión. 

Si sospechas o eres testigo de alguna propaganda ilegal, puedes hacer la denuncia respectiva al Servicio Electoral aquí. 

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