Presidente del Consejo Minero por aprobación del Royalty: «Se llega a un texto que es ostensiblemente mejor que el de hace tres años»

El presidente ejecutivo del Consejo Minero, Joaquín Villarino, conversó con La Prueba de ADN y analizó la aprobación de la Ley del Royalty minero y también se refirió a la propuesta nacional del Litio.

Como primera apreciación, destacó que «se llega a un texto que es ostensiblemente mejor que el que salió de la Cámara de Diputados que salió hace tres años».

Destacó que se «establece una carga tributaria máxima de 46,5% para las compañías que producen más de 80 mil toneladas de cobre fino y entre 50 y 80 mil de 45,5%»

«Esto significa un incremento, en una sola reforma, de una sola vez, de un 20% de la carga tributaria del sector minero. Es un incremento muy importante para el sector minero chileno», añadió.

Haciendo un análisis del contexto internacional, apuntó a que «nuestros directos competidores, según el Fondo Monetario Internacional, que son Perú, Australia, Canadá, Estados Unidos (…) están más cerca del 40%«.

«Nosotros quedamos con un promedio país en torno a 44,8%, con un tope de 46,5%«, precisó Villarino. Bajo la misma línea, apuntó a que hora se debe pensar en cómo «ayudamos a que el Gobierno cumpla con un compromiso que adquirió durante la tramitación de este proyecto».

De igual manera, Joaquín Villarino apuntó a que «quedan muchas cosas por hacer, y creemos que hay que tener mucho cuidado en otras que se van a hacer en el mediano plazo, porque pueden terminar siendo un lastre que la minería, en vez de recuperar competitividad, la termine por perder del todo».

Litio

Junto a las reacciones sobre la Ley del Royalty, el representante del Consejo minero también se refirió en torno a la Política Nacional del Litio. Considerando el contexto actual, apuntó a las «discusiones ideológicas» que, najo su percepción, restan en el objetivo de fondo.

«Hemos perdido muchísimo tiempo en una discusión de sí esto lo tiene que desarrollar el sector público, llámese el Estado, o los privados. Es una discusión ideológica», sostuvo.

«Después de un año y tanto se toma una decisión. Hemos perdido un año de muy buenos precios. Probablemente, lo que se debió haber hecho era licitar cuotas adicionales y haber permitido que el sector privado comenzara a operar con la agilidad que lo caracteriza«, planteó.

En esta línea, mencionó que «el Estado pierde el tiempo intentando construir una empresa nueva del litio. Se sabe que constituir una empresa no es simplemente una escritura (…) todo eso toma mucho tiempo».

Así, indicó que «si seguimos discutiendo en cuestiones que son más bien de carácter ideológicos en vez de prácticos», las discusiones se aplazarán más de lo conveniente.