INIA inauguró el Centro Nacional de Bioinsumos con mira «hacia los modelos productivos más sostenibles»

En otro capítulo de Tu Nuevo ADN, Andrea Obaid conversó con Iris Lobos, directora nacional del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) sobre la inauguración del Centro Nacional de Bioinsumos (CeNBI) de Chile.

Bajo la creación del INIA, el Instituto se inauguró la mañana de este jueves, 27 de abril, en la ciudad de Chillán. Según consignó la invitada, esto «viene completamente en la línea de la transición hacia los modelos productivos más sostenibles«.

Además, destacó que «somos el segundo país que más agroquímicos utiliza, según los países que pertenecen a la OCDE«, lo que resulta ser un dato alarmante y que motiva la acción de diferentes partes.

Lobos enfatizó en «el daño que provoca esto, no solamente al medio ambiente, en la biodiversidad, sino que también a las personas, a los trabajadores que aplican estos agroquímicos. Hay mucho daño a la salud«.

En esta línea, destacó la importancia del CeNBI, a través del cual se quiere «prospectar, desarrollar, transferir y escalar las tecnologías de bioinsumos, para que puedan estar disponibles para el mercado nacional e internacional».

Un impacto en la salud

A modo de análisis, y considerando el escenario en el que actúa el Centro Nacional de Bioinsumos, se apunta a la regularización del impacto que tiene el uso de pesticidas y/o agroquímicos en el consumo de productos.

«Claramente, impacta a la salud. Se han hecho esfuerzos, pero no han sido suficientes para ir disminuyendo -el impacto-. Por ejemplo, Unión Europea tiene estipulado que, de aquí al 2030, ellos tienen que haber reducido en un 50% menos el uso de agroquímicos», mencionó.

A raíz de esto, la directora del INIA apuntó a que en Chile «tenemos el desafío de poder avanzar en este tipo de políticas públicas«, con la idea de subsanar el impacto que se tiene sobre la salud

Trabajo en torno a los alimentos

Profundizando en el tema, Iris Lobos también destacó algunos datos «domésticos, pero que no son la solución» ante un problema mayor. Se considera lavar las frutas y verduras, pelarlas y diferentes procesos, ya que «estos agroquímicos quedan en la cáscara«.

Más allá de estas consideraciones, puntualizó que «INIA lleva 20 años trabajando con microorganismos para poder avanzar en el control biológico. Es decir, que podamos reducir el uso de agroquímicos y podamos utilizar bioinsumos.

Respecto a esto, detalló es: «Utilizar microorganismos, bacterias, hongos, virus, que se utilizan para ir protegiendo a las plantas, para que esta no tenga enfermedades (…) todo eso va a hacer que la reducción e agroquímicos pueda seguir avanzando en lo que necesitamos».