Exmédico de Sebastián Piñera y colaborador de la CNI es condenado a ocho años de cárcel por homicidio en dictadura

Manfred Jürgensen Caesar, ex médico de Sebastián Piñera, y colaborador de la CNI, fue condenado por la Corte Suprema a ocho años y un día de cárcel como autor de la muerte de un profesor durante la dictadura cívico-militar encabezada por Augusto Pinochet.

El facultativo, quien es hermano del ex intendente y convencional, Harry Jürgensen, fue condenado por el máximo tribunal del país como coautor de la muerte del profesor Federico Álvarez Santibáñez, quien era militante del MIR, en un hecho ocurrido el año 1979, cuando fue detenido por funcionarios de carabineros y entregados a agentes de la Central Nacional de Inteligencia (CNI).

En 2010, el entonces ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, propició 1805 querellas por hechos ocurridos en dictadura, entre ellos la muerte de Álvarez Santibáñez, en aquel entonces la actual ministra de la Corte Suprema, Ana Chevesich lo entrevistó y dejó en libertad, posteriormente, en 2016 el ministro en visita Mario Carroza quien lo condenó como cómplice a tres años y un día de libertad vigilada y firma mensual.

Este fallo fue revocado por el Máximo Tribunal a principios de este año, modificando la participación de Jürgensen de colaborar a coautor de la muerte del profesor, al ser la última persona que lo vio con vida.

Nelson Caucoto, abogado de la familia de la víctima, valoró el fallo de la Corte Suprema, asegurando que es importante que estos hechos no queden en impunidad y que el condenado debe ser trasladado al penal Punta Peuco.

«Yo miro con alta fe lo que ha hecho la justicia, no solo en este caso, sino que en otros, porque en todos los casos cometidos por el Estado, son casos que están condenados a la impunidad total, y aquí en Chile, afortunadamente, con el transcurso del tiempo, algunos dirán que es muy tarde, pero se hace justicia, aquí se hizo justicia por una situación muy complicada, muy difícil que en su momento fue muy emblemático. Bienvenida sea esa sentencia, le permiten esa conformidad a la familia, de que los hechos no han quedado en la impunidad«, dijo el abogado querellante.

Según los antecedentes recopilados por la justicia, Federico Álvarez, junto a otra persona, fueron detenidos por Carabineros de la sexta comisaría de Recoleta en agosto de 1979 y posteriormente entregados a la CNI, lugar donde fueron torturados y atendidos por tres médicos, siendo el último de ellos Manfred Jürgensen.

Defensa reclama inocencia

El hijo del doctor, a través de una carta, insiste en la inocencia de su padre y cuestiona a la justicia, afirmando que los ministros y jueces no lo han visto ni escuchado, condenándolo por algo, que según él no hizo.

Desde la defensa de Manfred Jürgensen, que actualmente tiene 79 años, buscan revertir la forma de cumplimiento de la condena, apelando a razones humanitarias, así lo confirmó su abogado, Felipe Solís.

«Bajo la lógica de que existen antecedentes serios y calificados, que hacen presumir que el señor Jürgensen no está en condiciones de cumplir la pena, se hacen esfuerzos jurídicos con antecedentes clínicos, médicos y suficientes, a juicio de la defensa, para que al señor Jürgensen se le permita el cumplimiento intra domiciliario de conformidad como ha ocurrido en casos similares», sostuvo el defensor.

De esta manera, se está a la espera que se decrete la orden de detención en contra de Jürgensen para que sea trasladado a un centro penitenciario donde cumpla la pena dictada por la Corte Suprema.

En tanto, desde la defensa del doctor agotan las vías para que se revierta la forma de cumplimiento, a pesar de que el recurso del Máximo Tribunal está ejecutoriado y no permite recurso alguno, apelando a la edad del condenado ante el Tribunal de origen del caso.