«Reconocemos la firmeza de su convicción»: Presidente Boric encabeza inauguración de estatua en homenaje a Patricio Aylwin en La Moneda

Este miércoles, en la Plaza de la Ciudadanía, frente al Palacio de La Moneda, en Santiago, se inauguró una estatua de bronce en honor al fallecido expresidente Patricio Aylwin Azócar, el primero en el cargo tras la dictadura cívico-militar.

El evento contó con la intervención del Presidente Gabriel Boric, Miguel Aylwin Oyarzún, hijo del expresidente, y del diputado y actual presidente de la Democracia Cristiana (el partido de Aylwin), Alberto Undurraga. Además, llegaron hasta el lugar los expresidentes Ricardo Lagos y Sebastián Piñera. 

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El discurso de Boric

El presidente Boric, junto con saludar a la familia del expresidente Aylwin, hizo una mención a los primeros recuerdos del falangista.

«Agradecerles la generosidad de permitirme ser parte de este acto y a través de uds. saludar a tanta gente a lo largo y ancho de Chile, a quienes el Presidente Aylwin llenó de una profunda esperanza. Y me atrevo a decir a lo largo y ancho de Chile porque de mis primeros recuerdos en el extremo austral del país es la calcomanía del No con el arcoiris y una manifestación en avenida España, donde la gente se subía a los techos, para celebrar el reencuentro de los demócratas».

«Es difícil para mí el poder pararme acá, mirar la estatua de don Patricio y pensar en el tremendo desafío de estar a la altura de su sobriedad y dignidad republicana, de la cual trato todos los días de aprender. Esta ceremonia es republicana, entre otras cosas, porque nos reunimos aquí, en la Plaza de la Ciudadanía, para rendir homenaje a un hombre, a un profesor, a un político, a un padre, un abuelo, en quien reconocemos la firmeza de su convicción al servicio de un solo interés a lo largo de su vida pública, que es el bien superior de Chile», agregó después el Mandatario.

El deber de aprender

Con el libro «El poder de la paradoja: 14 lecciones políticas de la vida de Patricio Aylwin» en mano, Boric citó parte de los motivos para el servicio público del fallecido mandatario: «Concibo la vida como una tarea: desde niño, sentí que la tarea era la justicia. Lucha por la justicia. Eso he procurado hacer toda mi vida: por eso fui abogado y profesor de derecho, y por eso me hice político: para luchar por la justicia de nuestro pueblo».

«Quizás esta estatua también resume la conciencia histórica de un personaje que atravesó toda la historia de Chile, esa consciencia histórica que muchas veces perdemos cuando evaluamos las cosas solamente por el momento que estamos pasando (… ) No son solo bronce, estatuas o palabras al aire, sino que son el alma y la historia de Chile y por lo tanto, es nuestro deber tratar de aprender de ellos», añadió el Presidente.

Hacia el final, reflexionó sobre una icónica frase de Aylwin, que fue también sello de la transición en el país: «‘La medida de lo posible’ pertenece a los pueblos, a las mayorías y sus límites se encuentran allí, donde se alojan las principales preocupaciones y anhelos de todos y todas. Lo posible es por lo que hay que dejar todo nuestro esfuerzo, nuestro empeño; es lo que se define colectivamente. No es el desgano como algunos malamente pudimos haberlo interpretado anteriormente. Requiere de gobernantes dispuestos a la escucha, al diálogo y al entendimiento, que trascienda al oficialismo y abarque a todos los sectores políticos y sociales».