MOP establece ruta a Dirección General de Aguas: “Dentro de las prioridades está asegurar el derecho humano al agua”

El pasado viernes, el Presidente Gabriel Boric nombró como nuevo director nacional de la Dirección General de Aguas (DGA) al ingeniero civil Rodrigo Sanhueza.

En este contexto, el ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García, se refirió a los principales desafíos que tendrá el nuevo encargado en el organismo, remarcando las prioridades del Gobierno en cuanto a amortiguar la crisis hídrica.

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Sanhueza se ha desempeñado desde 2004 en la DGA ocupando diversos cargos en las regiones del Biobío y O’Higgins, donde ejerció como director regional de Aguas entre el 2014 y 2018.

Así es como el ministro García señaló que “dentro de las prioridades del nuevo director está asegurar el derecho humano al agua, algo que ya está consagrado en el nuevo Código de Aguas. Su implementación no solo requerirá de un esfuerzo mayor, sino también de sentido de urgencia.

De igual forma, la autoridad destacó que otro de los retos para Sanhueza será “seguir trabajando en coordinación con otros ministerios, para que podamos implementar una política hídrica nacional, donde los consejos de cuencas y la DGA, tengan un rol crítico para regionalizar la gestión del agua, algo que hoy está ausente de nuestras políticas públicas”.

Los desafíos de Sanhueza en la DGA

El nuevo director reconoció los desafíos para cumplir con los objetivos del Gobierno y destacó el nuevo Código de Aguas, donde es relevante la coordinación con otras direcciones y carteras como la de Medioambiente

Además, Sanhueza puntualizó que otro de los grandes desafíos será la correcta ejecución del presupuesto, ya que según explica “históricamente la DGA ha tenido un presupuesto bastante acotado, pero este año son 38 mil millones que tenemos el desafío de poder ejecutar. A través de nuestras direcciones regionales y a nivel central, estamos trabajando para poder seguir avanzando en presupuestos mayores”.

Finalmente, según indica el nuevo director, el presupuesto es fundamental ya que el Código de Aguas impone tareas a la DGA que no se podrán cumplir si no se cuenta con los recursos para este objetivo. “Tenemos que ejecutar lo que hoy se nos entregó y seguir creciendo. Esa es la única forma que las letras del Código de Aguas se hagan realidad en los territorios”, detalló.