Condenado a siete años por delitos en el estallido social solicita indulto al Presidente Boric

Fernando Leal, abogado defensor de Felipe Santana, solicitó el indulto de su cliente al Presidente de la República, Gabriel Boric, por su condena a siete años de presidio por su autoría en el delito de hurto, daños a mobiliario público e incendio frustrado en lugar habitado en la catedral de Puerto Montt.

Estos hechos fueron cometidos durante el estallido social de 2019. En 2020, el hombre de 20 años fue condenado por el Tribunal Oral en lo Penal de Puerto Montt -el único por los delitos al inmueble- y en 2021 la Corte de Apelaciones confirmó el fallo.

El tribunal acogió dos circunstancias agravantes de responsabilidad penal, como «cometer el delito con ocasión de incendio, naufragio, sedición, tumulto o conmoción popular u otra calamidad o desgracia y cometer el delito en lugar destinado al ejercicio de un culto».

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Según contó a El Llanquihue, el abogado busca un «indulto en particular» del Mandatario y aseguró que confía en el perdón presidencial. «Creo que se le negó su derecho a defensa y debido proceso, toda vez que no hay prueba alguna que lo vincule con la hoguera», sostuvo.

Además, señaló que el condenado tiene un «retraso cognitivo» que el tribunal no tomó en consideración en su fallo y que «lo único que existe es una fotografía donde aparece tomando una malla que, posteriormente, aparece en dicha hoguera».

Leal añadió que «ningún juez ha sido capaz de acreditar que realizó el incendio».

El mismo medio cuenta que una persona que fue su profesora descarta que Santana intentara quemar la catedral de Puerto Montt y que el arzobispo Fernando Ramos lo visita en prisión.

En 2021, una carta que entre sus firmantes tenía al sacerdote Felipe Berríos pedía a la arquidiócesis desistir de la «persecución» contra Santana: «Expresamos nuestra más profunda pena e indignación frente al caso de Felipe Santana, el joven perseguido inmisericordemente en los tribunales de justicia por la diócesis que usted gobierna en Puerto Montt».

«Hemos podido revisar los antecedentes del caso, y pensamos que la acción de perseguir a Felipe de la forma en que lo está haciendo la Fiscalía y la policía, con ayuda de la abogada de la arquidiócesis de Puerto Montt, es una manifestación más —de muchas otras— que pone a los obispos en contra del evangelio», añadían.