Carmen Gloria Valladares y su relevante rol en la instalación de la Convención Constitucional: «En ningún momento dudé que el acto iba a salir adelante»

Una intensa jornada protagonizó este domingo Carmen Gloria Valladares, abogada de la Universidad Católica y secretaria relatora del Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel), quien tuvo la responsabilidad de dirigir la primera sesión de la Convención Constitucional.

En primera instancia la autoridad debía dar lectura al Acta de Proclamación de la Elección de Convencionales Constituyentes, considerando la pregunta a los miembros de la Convención sobre aceptar el «cargo conforme al Capítulo XV de la Constitución Política de Chile«.

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Si bien su labor consistía en liderar el proceso de instalación de la Convención y la elección de la presidencia, la autoridad se vio enfrentada a tensos momentos, luego de que la ceremonia estuviera suspendida temporalmente en medio de incidentes y denuncias de represión.

La tranquilidad y empatía de Valladares, destacada por los mismos constituyentes, provocó una ola de aplausos en el lugar, y la transformó en una de las figuras más importantes de la jornada.

Carmen Gloria Valladares: «No dudé de que el acto iba a salir adelante

Bajo ese contexto, en conversación con diario El Mercurio, la abogada sostuvo que «en ningún momento dudé de que el acto iba a salir adelante, pese a los problemas que tuvimos». Asimismo, la abogada manifestó que «la democracia a veces tiene manifestaciones que no nos gustan, pero son parte de la vida nacional (…) la gran herramienta es escuchar».

Junto con esto, la autoridad agregó que «cuando comenzó lo del Himno Nacional continué con el canto porque hay que respetar la Bandera. Tampoco tenía noticia de lo que estaba sucediendo fuera, y me reclamaban que había gente reprimida que se estaban afectando los derechos de las personas, y por eso suspendí».

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Ante las acusaciones de represión en los alrededores del exCongreso, Valladares aseguró que tiene «la convicción de de que era un acto que debía tener la transparencia y y el reconocimiento de todos los ámbitos de la nación. No podíamos estar en un acto tan noble, que recogía la voluntad popular, y al mismo tiempo, había personas que estaban siendo reprimidas. No podía compartir esto. Era necesaria la suspensión para que país pudiera estar en tranquilidad» agregó.

La antofagastina además se refirió a sus deseos para la nueva Carta Fundamental, expresando que esta debiese guiar el «destino de las próximas generaciones en justicia, igualdad, en respeto a algunas situaciones que no se han considerado en otras constituciones, por distintos factores: políticos e históricos» finalizó.