Sin contacto con otros reos y leyendo: así han sido los días de Nano Calderón en prisión preventiva

Cumpliendo una medida cautelar de 120 días de prisión preventiva está Hernán Calderón Argandoña, quien fue encerrado en el centro penitenciario Santiago 1 desde fines de agosto.

Durante estas semanas, la vida del joven de 23 años ha sufrido un vuelco a lo que era antes: los viajes, hoteles y lujos, han sido reemplazados por libros, una habitación sin vista al exterior y almuerzos carcelarias. Así contó el medio Glamorama de La Tercera, en donde relataron que «Nano» pasa sus días conversando con los gendarmes puesto que está apartado de los otros 4.700 presos del recinto.

Fue en agosto cuando el joven fue formalizado por parricidio frustrado tras atacar a su padre, el abogado Hernán Calderón; además de daños, disparo injustificado, amenazas no condicionales y lesiones menos graves en contexto de Violencia Intrafamiliar y otros delitos, según informó el 4°Juzgado de Garantía a mediados de septiembre.

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A pesar que la defensa de Nano pidió arresto domiciliario, la solicitud fue denegada por el juzgado. Hoy el joven está todo el día en la misma pieza: ahí le llevan la comida y tiene tres libros para entretenerse.

En tanto, lo que más ha ayudado al recluso a pasar sus días, son las conversaciones con los gendarmes. Según informó el citado medio, el joven «tiene muy buena onda con ellos y con los funcionarios de Santiago 1. Se ha manifestado contento por el trato, cosa que no olvidará. Ha dicho que, una vez que abandone la cárcel, los llamará para saludarlos y agradecerles».

Hay que señalar que el padre de Nano pidió recalificar el delito por el cual fue imputado su hijo, quien le realizó varios cortes en su brazo. De aceptarse esta petición, Calderón podrá incluso cumplir una pena en libertad. En tanto, el abogado se representa a sí mismo en este caso contra el joven, debido a que su representante renunció.