Experta analizó consumo de agua con sequía y crisis del coronavirus: «Es probable que suba y tengamos la tormenta perfecta»

En días de emergencia sanitaria, en que el agua se hace más necesaria que nunca, es importante recordar que estamos en una crisis hídrica, donde en muchas zonas de nuestro país no hay acceso a ella producto de la sequía. Sobre la importancia de este acceso conversó con Ciudadano ADN la abogada especialista en derechos de agua, Natalia Dasencich.

La abogada, también encargada legal de la Junta de Vigilancia del Río Maipo, recordó que la sequía se viene arrastrando hace varios años, y en la última temporada de verano se llegaron a tomar «medidas extraordinarias de distribución» para poder dotar a Santiago de agua. Este tipo de acuerdos, según explicó, siempre se hacían en invierno, y ahora se tuvo que quitar agua a los agricultores para entregarle agua potable a Santiago, asegurando el suministro hasta el 31 de agosto. «Fue súper complicado para ellos, pero pudimos pasar la temporada».

Sin embargo, las semanas de crisis sanitaria producto del coronavirus podrían cambiar ese panorama. Dasensich plantea que aún «es un tiempo demasiado corto para ver si el consumo de la ciudad ha tenido un alza», pero advirtió que «mirando la experiencia de otros países, es probable que suba», con lo que «tendremos la tormenta perfecta».

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La prioridad, según explicó, será garantizar el suministro de agua para servicios como hospitales, siempre en un «precario equilibrio». «Es más importante que nunca cuidar el agua, porque si Santiago logra ahorrar agua, podemos embalsar mejor en El Yeso, y con eso asegurar el suministro para todo el año», indicó.

La Junta de Vigilancia del Río Maipo que Dasensich representa legalmente ha actuado «de acuerdo a las normas del Código de Agua», según aseguró, adelantando que, en caso de extrema escasez y si los propietarios no llegan a un acuerdo para repartirse las aguas, «el Estado debe intervenir». Incluso, si en ciertas zonas se ve amenazado el consumo, el Estado «puede y debe» expropiar derechos para asegurar el suministro.

Para la experta en derechos de agua, hay «una subutilización de la normativa que ya hay para asegurar el consumo humano». La meta para asegurar la sustentabilidad del embalse es de 100 hectómetros cúbicos de llenado, aun cuando tiene una capacidad de 220. Según explicó la abogada, «siempre se ha dicho que el agua potable domiciliaria representa el 5% del uso total del agua. Si bien esa regla a nivel general es cierta, la Región Metropolitana en épocas normales consume un tercio de lo que entrega el Rio Maipo. Pero en épocas extremas, como el verano pasado, se lleva dos tercios. Entonces, el 60% del consumo es de Santiago».

En atención a estas cifras, «cualquier cambio de hábito produce cambios importantes en lo que podemos almacenar en el embalse», puntualizó la experta. Por eso, subrayó la importancia de que «como ciudadanos empecemos a hablar de cómo ahorrar», llegando a niveles de países desarrollados. A modo de ejemplo, Dasensich contó que en California se consumen 120 litros por persona al día, mientras «aquí tenemos personas que consumen 500». «Es importante que como ciudadanos empecemos a organizarnos y entre nosotros cuidar el recurso», finalizó.