Oposición de Nicaragua rechazó reforma electoral de Daniel Ortega y la califica de «represiva»

La oposición rechazó al unísono el proyecto de reformas electorales impulsa el gobierno de Nicaragua. Fueron diez los precandidatos a la presidencia, adversarios de Daniel Ortega, quienes criticaron al oficialismo. Los postulantes calificaron a la iniciativa como «excluyente» y que posee un carácter «represivo».

Los rivales del régimen de Ortega denunciaron el aumento de la represión en contra de los opositores. Los presidenciables aseguraron que la reforma busca «nuevas inhibiciones para aplicarse a los candidatos de la oposición«. Además recordaron que el actual parlamento está dominado por el oficialismo.

Los postulantes a la presidencia emitieron un documento sobre la iniciativa gubernamental. En el texto manifiestan que se pretende institucionalizar la «represión» al incorporar leyes que violan la constitución y los derechos políticos. Nicaragua vivirá elecciones el 7 de noviembre en medio de una crisis política.

La propuesta retira las atribuciones del tribunal electoral en la autorización de manifestaciones partidarias en campaña. Y le otorga ese poder a la policía y deja a Ortega como «juez y parte» del proceso, según los opositores. Los precandidatos estiman que la reforma evidencia «las maniobras y la manipulación» del proceso.

Entre quienes suscriben el mensaje contra el régimen hay diferentes tendencias políticas. Entre otros, aparecen la periodista Cristiana Chamorro, el exdiplomático Arturo Cruz y Medardo Mairena del Movimiento Campesino. Se trata de uno de los primeros actos de consenso de la oposición en años.

El Confidencial describe que los opositores buscar llegar a la elección con un candidato único, por medio de primarias. Los comicios generales llegarán en medio de una crisis política, tras las masivas protestas de 2018. En esas manifestaciones hubo 328 muertos y miles de exiliados, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

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