Capital de Liberia vivió revuelta en barrio con cuarentena sanitaria por ébola
No hemos sido capaces de controlar la propagación del virus debido a la resistencia por parte de los ciudadanos", explicó la presidenta de ese país, Ellen Johnson-Sirleaf.
Las calles de Monrovia, la capital de Liberia, vivieron enfrentamientos cuando ciudadanos de West Point, el barrio donde se decretó una cuarentena sanitaria por el ébol, comenzaron a arrojar piedras a una policía que respondió con gases lacrimógenos para dispersar a la multitud. Al menos cuatro personas resultaron heridas informaron agencias.
Los vecinos estaban enfadados porque se encontraron todos los accesos bloqueados con barricadas levantadas por la policía con muebles y alambres de espino, lo que les impedía ir a trabajar o a comprar. “Simplemente nos lo encontramos esta mañana. Salimos y no podíamos ir a ninguna parte”, dijo Alpha Barry de 45 años.
Este es uno de los barrios más populares con unos 75.000 habitantes y el pasado fin de semana sufrió un ataque a un centro provisional de aislamiento protagonizado por residentes que se oponían a la presencia de enfermos de ébola en la zona. En esa jornada se escaparon una veintena de enfermos que ya habrían sido localizados y vueltos a aislar.
Ante esto la presidenta liberiana Ellen Johnson-Sirleaf decretó un toque de queda entre las 21:00 y las 6:00 horas para evitar nuevos incidentes. “No hemos sido capaces de controlar la propagación del virus debido a la resistencia por parte de los ciudadanos, a las prácticas culturales en los entierros y al desprecio a los consejos del personal sanitario y a las advertencias del gobierno”, aseguró Johnson-Sirleaf, al anunciar la nueva cuarentena de los barrios West Point y Dolo Town en Margibi.
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